La oficina de Obama desestima como «ridículas» las acusaciones de traición formuladas por Trump.
La oficina del expresidente estadounidense Barack Obama ha calificado como «ridículas» las acusaciones de traición que le lanzó el presidente Donald Trump, quien sostiene que Obama manipuló las elecciones de 2016, donde Trump ganó a Hillary Clinton.
Patrick Rodenbush, portavoz de la oficina de Obama, expresó que, aunque suelen no responder a desinformación de la Casa Blanca, las acusaciones merecen una respuesta por lo indignantes que son. Aclaró que nada en un documento reciente cuestiona la conclusión ampliamente aceptada de que Rusia intentó influir en los comicios de 2016, sin poder manipular votos.
Rodenbush mencionó que estas conclusiones fueron respaldadas en un informe de 2020 por una comisión de Inteligencia del Senado, presidida por Marco Rubio. Trump, por su parte, afirmó que Obama es «culpable» de «traición» y reiteró que hubo intentos de manipulación en las elecciones de 2016.
El presidente también comentó sobre archivos de Jeffrey Epstein y la controversia en torno al cierre de un caso. Insinuó que la atención debería centrarse en las acciones de Obama, citando declaraciones de Tulsi Gabbard, actual directora de Inteligencia Nacional, quien mencionó nuevas pruebas de una supuesta conspiración por parte de Obama y su Administración contra Trump durante la elección de 2016.
Gabbard presentó correos y documentos, alegando que muestran una traición en las elecciones. Sostuvo que no hubo intervención rusa en 2016 ni ciberataques que alteraran el resultado electoral.
Trump compartió en sus redes sociales un video generado por Inteligencia Artificial que mostraba un arresto ficticio de Obama por el FBI, así como imágenes del exmandatario vestido de prisionero.
DCN/Agencias