
Un niño de 9 años falleció en Santa Bárbara del Zulia, municipio Colón, tras intentar realizar un reto viral de TikTok que resultó fatídico. El desafío, conocido en redes sociales, consiste en colgarse del cuello con una cuerda durante 20 minutos, una práctica sumamente peligrosa que el pequeño intentó hacer junto a su hermano de 14 años.
La tragedia se reveló cuando la madre de los menores entró a la habitación y encontró al niño suspendido en el aire. El Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) investiga el caso. Aunque aún no hay confirmación oficial, las autoridades creen que el niño intentaba cumplir con el reto viral en el momento del incidente.
El hermano mayor, quien fue testigo del suceso, está bajo custodia policial mientras se aclara lo ocurrido. Las autoridades han subrayado la importancia de actuar rápidamente para evitar la difusión de este tipo de desafíos peligrosos entre los jóvenes, alertando sobre los riesgos que conllevan estos retos que se viralizan en plataformas como TikTok.
Este triste episodio destaca el creciente peligro de los retos virales en internet, que atraen a más jóvenes en busca de popularidad efímera. A pesar de que TikTok ha tomado medidas para eliminar contenido dañino, estos desafíos continúan siendo un problema, especialmente entre los adolescentes, quienes a menudo no comprenden los riesgos asociados.
La tragedia en Santa Bárbara del Zulia también ha iniciado un debate sobre la supervisión parental en el uso de las redes sociales. Expertos en seguridad digital y psicología infantil advierten a los padres sobre la necesidad de monitorear las actividades en línea de sus hijos y de fomentar el diálogo sobre los peligros de los contenidos virales.
Asimismo, se hace un llamado a las plataformas sociales para implementar medidas más severas que protejan a los menores de estos retos peligrosos. En cuanto a la investigación, las autoridades siguen recopilando información para esclarecer los hechos y determinar si el reto viral fue la causa directa del fallecimiento del niño. Este lamentable incidente actúa como un recordatorio de los riesgos de las redes sociales y la necesidad de una mayor supervisión y educación digital en la actualidad.
DCN/Agencias