Estrategias para revitalizar tu vida sexual después del cáncer de mama

Impacto del cáncer de mama en la sexualidad

El cáncer de mama se posiciona como el tipo de tumor más común entre las mujeres, afectando a una de cada ocho. Los diagnósticos y tratamientos pueden alterar notablemente la vida de las pacientes, haciendo hincapié en su vida sexual.

La Dra. Isabel Echavarría, oncóloga del Hospital Gregorio Marañón y secretaria científica de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), menciona que los efectos secundarios de los tratamientos son la principal causa de las dificultades en la sexualidad. Explica que los tratamientos hormonales pueden reducir los niveles de estrógenos, lo que a su vez provoca una disminución del deseo sexual y sequedad en las mucosas, complicando las relaciones.

Por su parte, cambios físicos como los derivados de la mastectomía, cirugías adicionales o la alopecia por quimioterapia contribuyen a lo que la enfermera Ana Talavera describe como una “dificultad psicológica”, afectando la autoestima y la relación con la pareja.

Estrategias para recuperar la intimidad

La Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) y los especialistas destacan que retomar la vida sexual es un proceso que requiere tiempo y comunicación efectiva. Entre las recomendaciones destacan:

  • Paciencia y autoaceptación: Es importante darse tiempo para observar el estado de ánimo y no exigir demasiado.
  • Comunicación con la pareja: Es fundamental hablar abiertamente sobre deseos, miedos y la necesidad de un tiempo antes de reiniciar la actividad sexual.
  • Lubricación: Se sugiere el uso de lubricantes para tratar la sequedad vaginal y evitar el dolor durante las relaciones.
  • Exploración: Ver el regreso a la actividad sexual como una oportunidad para explorar nuevas maneras de disfrutar.
  • Adaptación: Reconocer que la sexualidad puede tomar diferentes formas y lo vital es sentirse bien con la elección.

Fertilidad y tratamiento

Los expertos también alertan sobre la importancia de la anticoncepción durante el tratamiento, ya que el embarazo puede suponer riesgos de malformaciones fetales. Tras finalizar el tratamiento, no hay contraindicaciones absolutas para el embarazo, aunque se recomienda esperar entre dos y tres años y evaluar la situación de cada paciente.

Rehabilitación y bienestar sexual

La rehabilitación física tras el cáncer de mama no solo mejora la movilidad, sino que también tiene un rol positivo en la sexualidad. La enfermera Talavera señala que esta rehabilitación puede facilitar la actividad sexual, ya que en muchos casos implica ejercicio aeróbico. Consultar a los profesionales sobre cualquier dificultad sexual es fundamental, ya que muchas veces existen soluciones accesibles.

DCN/Agencias

Entérate al instante de más noticias con tu celular siguiéndonos en Twitter y Telegram
Suscribir vía Telegram

Lo más Leído

Tu opinión vale...

Lea también