La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) de México revocó la licencia de CIBanco y ha iniciado su proceso de liquidación, justo antes de la implementación de sanciones del Departamento del Tesoro de Estados Unidos. Estas sanciones están relacionadas con presuntos casos de lavado de dinero vinculado al narcotráfico de fentanilo. La decisión se produce en un contexto de creciente presión regulatoria sobre el sistema financiero del país.
CIBanco, que funcionaba como entidad de banca múltiple, solicitó abandonar el mercado tras una resolución de sus accionistas. La CNBV indicó que esta revocación fue aceptada como una acción «voluntaria» de la junta para «proteger los intereses de los clientes».
Este suceso ocurre pocas semanas antes de la activación de sanciones impuestas a otras entidades financieras, como Vector Casa de Bolsa e Intercam Banco, acusadas de facilitar operaciones relacionadas con el tráfico de fentanilo. A raíz de esto, Vector transfirió cuentas de inversión y vendió su gestora de fondos a Finamex, buscando mitigar riesgos.
El Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB) anunció que comenzará el 13 de octubre el pago de las obligaciones garantizadas. Los depósitos están asegurados hasta 400,000 unidades de inversión (UDIs) por cliente, equivalente a aproximadamente 3,42 millones de pesos o 186,000 dólares al tipo de cambio actual.
La liquidación de CIBanco subraya el aumento del escrutinio financiero y las advertencias del Tesoro estadounidense sobre el manejo de capitales relacionados con opioides. Aunque la CNBV no ha proporcionado detalles sobre posibles nuevas intervenciones, fuentes locales señalan que la presión internacional ha intensificado la supervisión de entidades financieras más pequeñas. La forma en que se maneje la liquidación de CIBanco será crucial para evitar desconfianza en el sistema financiero.
DCN/Agencias