Bajó el flujo de pasajeros entre Venezuela y Trinidad y Tobago
Desde el despliegue militar estadounidense, ha disminuido considerablemente el tráfico de pasajeros entre Venezuela y Trinidad y Tobago. Según operadores locales, el número de viajeros ha pasado de cientos cada mes a solo unas pocas docenas que utilizan los ferris.
Alana Medina, dueña del ferry Ángel del Orinoco, señaló que en junio transportaron 70 pasajeros, mientras que en agosto esa cifra bajó a solo 45. En la última travesía del ferry, el 11 de septiembre, apenas 15 personas abordaron, marcando la caída más pronunciada en casi una década. Medina atribuye esta disminución al temor por posibles cierres fronterizos y la tensión en las relaciones bilaterales, lo que ha afectado gravemente la situación financiera de su empresa.
La reducción en el flujo de pasajeros también ha impactado el comercio en los puertos de San Fernando y Cedros. Venezuela, que suele exportar madera, ropa y calzado, ahora ve cómo solo dos barcos de carga llegan mensualmente, en contraste con los tres despachos a la semana que se realizaban hasta 2024, según información de la División de Aduanas de Trinidad y Tobago.
Entre 2017 y 2024, el comercio entre ambos países experimentó una caída del 56%, según datos de la ONU. Cassian Valdez, un empresario del sector, denunció pérdidas de mercancía debido a extorsiones y confiscaciones en Venezuela, lo que ha llevado a reducir sus importaciones. En esta nueva realidad, Valdez ahora importa solo el 10% de madera desde Venezuela, mientras que el resto proviene de Brasil, y está considerando cesar por completo las importaciones desde Venezuela antes de que cierre el año.
El despliegue militar de EE. UU. y las tensiones políticas continúan generando un impacto negativo en la conectividad y en el comercio en la región. Las empresas de ferris enfrentan un futuro incierto, mientras que comerciantes están buscando nuevas alternativas en otros países para asegurar sus suministros.
DCN/Agencias