El Gobierno de Venezuela reportó el sábado que un «destructor» estadounidense realizó un abordaje «ilegal» sobre una embarcación venezolana, con «nueve pescadores» a bordo, lo que se interpreta como un intento de justificar “una escalada bélica” en el Caribe.
Yván Gil, canciller del país, mencionó que el barco pesquero fue abordado de manera hostil por la Marina de Guerra de EE. UU., específicamente por el destructor Jason Dunham (DDG-109), descrito como un buque militar con armamento significativo. Gil se refirió al abordaje en un pronunciamiento transmitido por VTV.
En el comunicado, se afirmó que18 efectivos armados abordaron la embarcación, lo que impidió a los pescadores comunicarse y llevar a cabo su actividad pesquera, que estaba debidamente autorizada. Los pescadores se encontraban a 48 millas náuticas de La Blanquilla, en aguas de la Zona Económica Exclusiva venezolana.
El Gobierno indicó que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana monitoreó el incidente en tiempo real y acompañó a los pescadores hasta su liberación.
Además, el Ejecutivo de Nicolás Maduro exigió a EE. UU. que cesara de inmediato estas operaciones, argumentando que son una amenaza a la paz en el Caribe. Aludieron a un despliegue militar estadounidense cercano, que incluye ocho buques y un submarino, y denunciaron un intento de propiciar un «cambio de régimen».
Por su parte, el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, describió el despliegue militar de EE. UU. como un «brutal ejercicio» psicológico y advirtió que cualquier agresión contra Venezuela resultaría en una respuesta contundente.
DCN/Agencias