Este viernes, el dólar mostró un ligero ascenso tras la pronunciada caída del día anterior, aunque se dirige hacia una semana de pérdidas. El índice dólar subió un 0,1%, alcanzando 97,66 puntos, pero mantiene una proyección de retroceso semanal del 0,1%, marcando su segundo descenso consecutivo.
En Estados Unidos, se reportaron datos económicos variados. Las solicitudes semanales de subsidio por desempleo registraron su mayor aumento en cuatro años, lo que opacó el dato de inflación de agosto, que fue el más alto en siete meses, aunque dentro de lo previsto. Analistas indican que la inflación controlada y un mercado laboral débil podrían abrir la posibilidad de recortes en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal. Dominic Bunning, jefe de estrategia de divisas G10 en Nomura, destacó que la debilidad laboral representa un obstáculo para recortes más acelerados, siempre y cuando la inflación permanezca estable. Los futuros apuntan a una reducción de 25 puntos básicos el 17 de septiembre.
En el ámbito del euro, este retrocedió menos de 0,1% a 1,1725 dólares, tras avances recientes. Los inversores moderaron sus expectativas de un nuevo recorte de tasas por parte del Banco Central Europeo, que mantuvo su tasa clave en 2% y su presidenta, Christine Lagarde, aseguró que la situación económica es favorable y los riesgos parecen estar equilibrados.
Frente al yen, el dólar avanzó un 0,4% a 147,76, mientras que Londres experimentó una caída en la libra esterlina del 0,2% a 1,3553 dólares, tras reportes de estancamiento en la economía británica en julio. Por su parte, el yuan se debilitó un 0,1% hasta 7,1234 por dólar.
DCN/Agencias