Más de 11.600 mujeres embarazadas en riesgo tras terremoto en Afganistán
Más de 11.600 mujeres embarazadas enfrentan una situación crítica en las áreas afectadas por el terremoto en Afganistán, donde la escasez de personal sanitario femenino y barreras culturales limitan su acceso a atención médica necesaria.
El último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que, aunque las mujeres son la mayoría de las víctimas del sismo, solo el 42% de los heridos que han llegado a hospitales son mujeres y niñas, mientras que el 58% son hombres. En un país con una alta tasa de mortalidad materna, el colapso del sistema de salud tras el terremoto ha convertido cada embarazo en un caso de alto riesgo. Las condiciones de trauma físico y psicológico pueden provocar partos prematuros o abortos, y la atención obstétrica de emergencia se ha vuelto casi inaccesible.
Según la OMS, esta disparidad en el acceso a la atención se debe a la "escasez de trabajadoras sanitarias" y a restricciones culturales que limitan la atención de mujeres por parte de hombres. En respuesta a esta crisis, la OMS y sus socios han empezado a desplegar equipos especializados en las áreas afectadas. Hasta el momento, han movilizado cuatro equipos compuestos por 26 trabajadoras sanitarias para realizar evaluaciones entre la población femenina.
Organismos como el Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa) han comenzado a distribuir Kits de Salud Reproductiva interinstitucionales en la región, destinados a ofrecer atención obstétrica y neonatal de emergencia.
El terremoto, de magnitud 6.0, que tuvo lugar el 31 de agosto, ha sido el más mortífero en Afganistán en casi tres décadas, con un saldo de 2.205 muertos y más de 3.600 heridos, muchos de ellos con lesiones graves que requieren atención quirúrgica inmediata. La catástrofe impactó a un país que ya era extremadamente vulnerable, con un sistema de salud debilitado por la falta de recursos y donde casi la mitad de la población dependía de ayuda humanitaria para sobrevivir.
DCN/Agencias