En 2025, España asignará el 2% de su producto interno bruto (PIB) al gasto en defensa, según estimaciones recientes de la OTAN. Esta es la primera vez que el país se conforma con el compromiso establecido en 2014, que marcaba el objetivo de alcanzar este nivel de inversión en un período de diez años.
El año pasado, apenas 19 de los 31 países miembros habían cumplido con la meta del 2%. Con España, ahora también lo consiguen Bélgica, República Checa, Luxemburgo y Portugal, mientras que otras naciones se encuentran entre el 2% y 2,1%.
El gasto en defensa de España tuvo un aumento significativo del 43,1% en comparación con el año anterior, subiendo de 22.693 millones de euros en 2024 a 33.123 millones en 2025.
A futuro, la OTAN, impulsada por el presidente de Estados Unidos y el contexto del conflicto en Ucrania, acordó un nuevo objetivo de gastos: alcanzar el 5% del PIB en 2035. De ese total, el 3,5% estará destinado específicamente a los gastos militares—como armamento, salarios y misiones—y el 1,5% restante se enfocará en la seguridad en un sentido más amplio.
En este contexto, España afirma que cumplirá con las exigencias de la OTAN, planificando llegar a un gasto del 2,1%. Según información de la organización, hasta el 3 de junio, los 31 Estados miembros ya lograron alcanzar el 2% del PIB en defensa, meta planteada en la cumbre de Gales de 2014 con un plazo en 2024.
DCN/Agencias