El economista y especialista en petróleo, Francisco Monaldi, manifestó que los recientes anuncios sobre la inversión china en el sector energético venezolano podrían tener más connotaciones simbólicas que prácticas.
Monaldi indicó que los contratos fueron suscritos entre finales de 2023 y principios de 2024 con varias empresas, incluida China Concord Resources Corp (CCRC), ubicada en Hong Kong. Esta firma está sujeta a sanciones por EE.UU. debido a su relación con el comercio no regulado de crudo iraní y ha sido relacionada con operativas en el «mercado negro» del petróleo venezolano, lo que genera incertidumbre sobre su efectividad.
Según información de Reuters, CCRC firmó en mayo de 2024 un contrato de producción compartida por 20 años para gestionar dos campos en el Lago de Maracaibo —Lago Cinco y Lagunillas Lago— bajo un modelo legal establecido por la Ley Antibloqueo de 2020, orientado a atraer inversiones ante las sanciones. Este plan contempla una inversión superior a 1.000 millones de dólares para reactivar pozos inactivos y aumentar la producción de 12.000 barriles diarios a 60.000 en 2026. En septiembre de 2024, la empresa envió 60 técnicos chinos y una plataforma de perforación para reactivar unos 100 pozos, con la meta de llegar a 500. El crudo ligero sería destinado a Pdvsa para consumo interno, mientras que el pesado se enviaría a China.
Monaldi también mencionó que CCRC no cuenta con experiencia directa en la operación de campos petroleros, lo que genera dudas sobre la viabilidad de la inversión y producción. Además, alertó sobre el riesgo de que el proyecto opere en un entorno de falta de transparencia, considerando la conexión con empresas en el mercado paralelo.
DCN/Agencias