En tribunales de Estados Unidos se han reactivado procesos judiciales contra Nicolás Maduro y su equipo cercano, quienes enfrentan acusaciones de «narcoterrorismo, secuestro y tortura». La Fiscalía estadounidense lo presenta como líder de un «entramado criminal» similar a un cartel, donde están involucrados funcionarios de alto rango, militares y empresas estatales venezolanas.
Según el diario ABC, durante la administración de Joe Biden, muchos de estos casos pasaron a segundo plano mientras se buscaba una negociación política. Con la reactivación de los expedientes, se detallan operaciones de esta red criminal que, supuestamente, utilizó puertos y aeropuertos controlados por el Estado para facilitar el envío de cocaína a EE. UU. en colaboración con las Farc.
El caso más reciente se está tramitando en un tribunal de Miami. Las familias Kenemore y Marval, junto a Jason Saad, demandaron a Maduro y a otros altos funcionarios venezolanos, amparados en la Ley Antiterrorista Federal y la de Florida. Relatan haber sido secuestrados entre 2020 y 2023 en represalia por la detención de Alex Saab, supuesto testaferro de Maduro. La privación de libertad duró entre 123 y 643 días.
El documento judicial menciona al llamado “cártel de los Soles”, que incluye mandos militares, así como a Pdvsa y su filial CVP, usadas para el lavado de dinero, según la Fiscalía. Entre los acusados están Diosdado Cabello, Tarek William Saab, Jorge Rodríguez, Delcy Rodríguez y Vladimir Padrino López.
Las demandas en Florida también incluyen acusaciones sobre el uso del «secuestro y la tortura de rehenes» como métodos de presión hacia Washington. Actualmente, Maduro enfrenta un doble frente: en Nueva York, un macroproceso penal que lo señala como «jefe del cártel de los Soles», y en Florida, una demanda por secuestros y torturas.
Este contexto judicial se da en paralelo al despliegue de tres destructores Aegis en la costa venezolana, autorizado por Trump, en un giro hacia el enfoque militar contra el narcotráfico. Según los fiscales, el cártel de los Soles se identifica como una red operativa de jerarcas que convirtió al Estado en una maquinaria criminal.
Entre los implicados, el exjefe de Inteligencia militar Hugo ‘el Pollo’ Carvajal se declaró culpable en EE.UU. de colaborar con las Farc y facilitar tráfico de cocaína. Tarek El Aissami también es mencionado como parte del cartel, señalado por haber usado Pdvsa para el tráfico de drogas.
DCN/Agencias