La tasa de participación laboral en América Latina y el Caribe promedió un 62,6% para el segundo trimestre de 2024, según el Panorama Laboral 2024 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Este dato se basa en un análisis de 17 países de la región.
La OIT señala que, aunque la oferta laboral se ha mantenido relativamente estable, sigue por debajo de los niveles de 2019. La tasa de desocupación ha disminuido en 2024, gracias a un leve aumento en el empleo y a la estabilidad en la participación laboral.
Sin embargo, la OIT advierte que la región no ha registrado avances significativos en la última década, con la tasa de participación y ocupación aún por debajo de los estándares de 2012. También se destaca una clara diferencia entre las áreas urbanas y rurales, con una menor tasa de participación en el campo de 3,2 puntos porcentuales respecto a las ciudades. La desocupación en áreas urbanas se redujo al 6,4%, mientras que en las rurales bajó a un 4,4%.
Los países con las tasas más elevadas de participación laboral incluyen a Bolivia (78,3%), Perú (70,2%) y Santa Lucía (69,7%).
Por otro lado, la OIT subraya las persistentes brechas de género en el ámbito laboral. En el segundo trimestre de 2024, la tasa de participación femenina fue del 52,1%, considerablemente menor que la masculina, que alcanzó el 74,3%. La tasa de ocupación femenina fue del 48,4% y la desocupación femenina se sitúo en un 7,2%, mayor que la del 5,2% entre hombres. A pesar de pequeñas mejoras, las diferencias de género siguen impactando el mercado laboral.
DCN/Agencias