El papa León XIV hizo un llamado urgente a la paz, enfatizando que la humanidad hoy clama por un alto al conflicto. En un mensaje dirigido a líderes internacionales, destacó que “no existen conflictos lejanos cuando está en juego la dignidad humana” y advirtió que “la guerra no resuelve los problemas, sino que los amplifica”.
El pontífice señaló las profundas heridas sociales que generan los enfrentamientos armados, expresando que “son marcas que tardan generaciones en cicatrizar”. Resaltó el sufrimiento de la población civil, subrayando que “ninguna victoria militar podrá compensar el dolor de las madres, el miedo de los niños y el futuro robado”.
El papa instó a la comunidad internacional a optar por vías diplomáticas en lugar de acciones bélicas, pidiendo que “la diplomacia haga callar las armas” y que las naciones busquen construir un futuro de paz, rechazando la violencia.
En otro contexto, la madrugada del domingo, Estados Unidos llevó a cabo bombardeos sobre tres instalaciones nucleares claves de Irán: Fordow, Natanz e Isfahán. El presidente Donald Trump describió la operación como “espectacular” y afirmó que las instalaciones fueron “completamente destruidas”, planteando que Teherán se enfrenta a una opción entre “paz o tragedia”.
Desde Israel, el primer ministro Benjamin Netanyahu respaldó la acción de Trump, calificándola como una “decisión histórica” con el fin de negar al régimen iraní acceso a “las armas más peligrosas del mundo”.
La situación actual revela un desencuentro entre llamados a la paz y las acciones militares, evidenciando la complejidad en la búsqueda de soluciones efectivas a los conflictos globales.
DCN/Agencias