Ataque israelí a planta nuclear de Isfahán: una escalada en el conflicto
El ataque aéreo israelí contra la planta nuclear de Isfahán en Irán, realizado durante la noche del viernes al sábado, fue calificado como un bombardeo de "gran escala". El portavoz del Ejército de Israel, Effie Defrin, indicó que las operaciones buscan aumentar los daños ya causados en la instalación.
Defrin comentó en una rueda de prensa virtual: "Durante la noche, profundizamos en el ataque contra el emplazamiento nuclear de Isfahán". Afirmó que ya habían golpeado la instalación en un ataque previo el 13 de junio y que el nuevo bombardeo tenía como objetivo consolidar los logros obtenidos.
Isfahán, junto a Natanz, ha sido objetivo de ataques aéreos israelíes durante la semana. Israel sostiene que el avance del programa nuclear iraní representa una amenaza para su seguridad. La prensa estatal iraní reportó los bombardeos y funcionarios del país afirmaron que no hubo fugas de materiales peligrosos tras los ataques.
La planta de Isfahán alberga el Centro de Tecnología Nuclear de Irán y una instalación de conversión de uranio, las cuales sufrieron "importantes daños", según fuentes israelíes. Además, el ataque en Qom resultó en la muerte de dos personas en un edificio residencial, según el Departamento de Gestión de Crisis local.
Israel ha intensificado sus bombardeos desde la madrugada del viernes, justificando sus acciones por los avances en la industria nuclear de Irán y los peligros asociados a su desarrollo de misiles balísticos. Los ataques han estado dirigidos no solo a infraestructuras militares, sino también a altos mandos de la Guardia Revolucionaria y científicos nucleares.
Hasta la fecha, los ataques en Irán han causado al menos 220 muertos, mientras que los lanzamientos de misiles iraníes han resultado en 24 fatalities en Israel, de acuerdo a reportes oficiales israelíes.
DCN/Agencias