El Senado de Colombia rechazó el 18 de junio la consulta popular propuesta por el Gobierno del presidente Gustavo Petro, que incluía doce preguntas sobre la reforma laboral y cuatro adicionales sobre el sistema de salud. La votación finalizó con 52 votos en contra y solo dos a favor, y se llevó a cabo sin la presencia total de los senadores, ya que los representantes de la coalición de Gobierno se retiraron una vez aprobado el proyecto de reforma laboral en el último debate.
El presidente Petro comentó en la red social X que “solo dos personas traicionaron la gran coalición en favor del derecho de los trabajadores”, señalando que de haber mantenido el quórum, se habría realizado la consulta popular. A pesar del rechazo, Petro aseguró que la consulta por decreto sigue vigente hasta la votación de conciliación del proyecto, y afirmó que siempre existió una mayoría en el Senado para esta consulta.
El Centro Democrático, partido opositor, celebró el rechazo a la consulta, destacando que “se hundió” la propuesta y agradeciendo a los senadores que, a su juicio, defendieron la Constitución y la ley.
En cuanto a la reforma laboral, esta fue aprobada artículo por artículo, poniendo fin a cuatro días de negociaciones. Se eliminaron disposiciones clave, como la que reforzaba la estabilidad laboral en casos de embarazo, prejubilación y discapacidad, así como regulaciones sobre trabajo a tiempo parcial y por horas. También se suprimieron propuestas sobre la jornada laboral, que buscaban implementar una semana laboral opcional de cuatro días manteniendo las 42 horas.
El siguiente paso tras la aprobación de la reforma será la conciliación con el Congreso, lo que dará lugar a un texto único que debe ser aprobado por ambas cámaras antes del cierre legislativo el 20 de junio.
DCN/Agencias