El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ordenó el despliegue del Ejército en el departamento de Nariño tras el asesinato de Luis Aurelio Araújo, líder indígena del pueblo Awá, en un ataque atribuido a grupos armados irregulares. Este incidente también dejó sin vida a dos de sus escoltas, Jesús Alveiro Chaves y Yackson Orlando Solarte.
El ataque ocurrió en Cuaiquer Viejo, zona rural del municipio de Ricaurte. Petro, en rueda de prensa, condenó la situación y solicitó al ministro de Defensa, Pedro Sánchez, reforzar la presencia militar en la región para reducir la violencia. Aclaró que no retirará al Ejército de Catatumbo, pero enfatizó la necesidad de incrementar su presencia en el suroeste, respetando la cultura indígena. Propuso una alianza entre el Estado y los pueblos indígenas para evitar enfrentamientos y asesinatos en estas comunidades.
El gobernador de Resguardo de Vegas, Niber Moreano, expresó su pesar por el asesinato de Araújo, quien había sido reconocido oficialmente en marzo como líder indígena y era coordinador general de su organización en su tercer mandato. Moreano mencionó que hay indicios de que estos hechos violentos están relacionados con asuntos políticos, señalando un contexto de riesgo en la zona.
El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) reportó que Araújo se había convertido en un blanco debido a su labor como defensor de los derechos y la autoridad tradicional Awá. En lo que va del año, 73 líderes indígenas y defensores de derechos humanos han sido asesinados en Colombia, siendo las principales víctimas de ataques grupos armados irregulares, quienes buscan controlar rutas de narcotráfico y minería ilegal.
Los departamentos más afectados por esta violencia son Cauca, Nariño, Antioquia y Norte de Santander, donde ha habido una fuerte presencia de actores armados y una débil intervención estatal.
DCN/Agencias