Los países que integran la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) han manifestado su rechazo al anuncio de la Administración de Estados Unidos de imponer aranceles a aquellos países que comercien con hidrocarburos provenientes de Venezuela.
Esta decisión es interpretada como una nueva ofensiva contra la República Bolivariana, buscando afectar su economía y provocar inestabilidad en sus instituciones. Según ALBA-TCP, las medidas comerciales que se pretenden aplicar son consideradas como una violación de las normas del comercio internacional y un trato discriminatorio que impactará negativamente los ingresos de Venezuela y el bienestar de su población.
El bloque también ha denunciado que la justificación presentada por Estados Unidos se basa en la criminalización de los migrantes venezolanos, lo cual, según su perspectiva, vulnera los derechos humanos y contraviene principios de la Carta de las Naciones Unidas y otros pactos internacionales relacionados con la población migrante.
La Alianza ha hecho un llamado a la comunidad internacional para que condene lo que catalogan como una acción ilegal y hostil del gobierno estadounidense, advirtiendo que esta situación no solo atenta contra el desarrollo del pueblo venezolano, sino que también representa una amenaza para otras naciones de la región de América Latina y el Caribe.
Los detalles de este pronunciamiento son parte del comunicado oficial emitido por ALBA, donde se enfatiza la necesidad de solidaridad frente a estas acciones.
DCN/Agencias