Un reto democrático, por Ángel Moisés Villasmil (@angelmoises)

La convocatoria a la toma de Caracas realizada por los factores de oposición y encabezada por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), representa más que una acción de presión para forzar al CNE a cumplir con la Constitución y hacer respetar el derecho pleno de los ciudadanos venezolanos de pedir a sus compatriotas la evaluación de la gestión pública de Presidente de la Republica, mediante un mecanismo de ejercicio de la soberanía popular que permita la culminación adelantada de su periodo; se convierte en un reto masivo de protesta Democrática, donde debe imperar la ponderación, la tranquilidad, seguridad y rechazo a cualquier acto o respuesta violenta, sea de la oposición o los oficialistas, no debe haber enfrentamiento ni respuesta a la provocación, debe ser una marcha sin muertos ni heridos, estos hechos solo servirán para que el régimen haga uso de la represión y se victimice ante sus países amigos, militantes y seguidores, sobre esta concentración estará colocada la mirada atenta de todos los países del mundo, de su contundencia en la asistencia pluralista, pacifista, mensaje unitario e inclusivo, dependerá el éxito de una estrategia que debe estar destinada a lograr la realización del referéndum revocatorio este mismo año.

Así que no está permitido ni justificado desviar el espíritu y propósito de la Toma, hay un objetivo planteado demostrar la intensión de los venezolanos de participar en un acto democrático de remoción de sus gobernantes con la única arma legitima que la Constitución Nacional y la Carta Democrática Interamericana lo establece, el sufragio libre, universal y secreto, los DEMOCRATAS no nos dejamos seducir por los golpistas, violentos ni los aventureros, conocemos que la lucha es difícil, el adversario no está dispuesto a dejar el poder que mediante elección popular le entregaron los electores, pero en este momento actual y ante la situación de crisis institucional, moral, ética, social y económica del país, hay la voluntad mayoritaria de los venezolanos de ponerle fin a la ineficacia, sectarismo e incapacidad de quienes se han convertido en los verdugos de un pueblo que se empobrece cada día, hora y minuto que permanecen en el gobierno despilfarrando, malgastando, disponiendo y apropiándose indecorosamente de la riqueza de nuestro país.

Este 1° de septiembre, no es para inmolarnos, es una oportunidad para decirle al régimen BASTA YA, de hambre, corrupción, inseguridad, pobreza, colas, escasez de alimentos, medicinas y suspensión servicios públicos, estamos llamados a la Grandeza, a obtener una gran victoria popular; no hay ocasión para las dudas, no tengamos miedo, es tiempo de valientes, de ciudadanos de valía, íntegros, virtuosos, decididos, es un compromiso de amor por la patria de los hombres, mujeres, trabajadores, desempleados, emprendedores y jóvenes, que sueñan con un país donde puedan desarrollarse, tener calidad de vida y bienestar.

Si no vas a la marcha, demuestra tu amor por Venezuela, levántate temprano iza o coloca tu bandera en tu residencia, empresa, negocio o comercio, si andas en la calle en tu vehículo enciende las luces todo el día, si eres comerciante suspende tu trabajo y párate junto a tus trabajadores frente a tu negocio de 11:00 a.m. a 1:00 p.m., a las 5:00 p.m. toca la corneta de tu vehículo, si estás en tu casa o andas en la calle, prepárate cómprate un pito y tócalo para que te escuchen y finalmente a las 7:00 p.m. y por dos horas seguidas hagamos un gran cacerolazo, recuerda que la suma de todos actuando para hacernos sentir, permitirá salvar a Venezuela.

 

DC / Ángel Moisés Villasmil  / Vicepresidente Ejecutivo de Redes Populares de COPEI   Partido Social Cristiano / @angelmoises

 

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