
El Partido Comunista de Venezuela (PCV), intervenido por el Tribunal Supremo de Justicia, calificó este martes de «acto de guerra» la orden de Estados Unidos de bloquear barcos que transportan crudo venezolano. Este mes, el gobierno estadounidense ya ha incautado dos embarcaciones.
En un comunicado, el PCV señaló que no se trata solo de sanciones económicas, sino de un cerco militar destinado a asfixiar la economía del país, con la intención de «forzar una capitulación» que permita al «imperialismo» apoderarse de los recursos que el expresidente Donald Trump catalogó como «robados».
La semana pasada, Trump firmó una orden de «bloqueo total» a todos los petroleros sancionados que ingresen o salgan de Venezuela, intensificando así la presión de Washington sobre el gobierno de Nicolás Maduro.
Trump expresó en su cuenta de Truth Social que Venezuela «está rodeada» por «la armada más grande en la historia de Suramérica», advirtiendo que habrá consecuencias hasta que se devuelvan «todo el petróleo, las tierras y otros activos».
El PCV, que se distancia tanto del gobierno de Maduro como de la oposición liderada por María Corina Machado, destacó que las palabras de Trump reflejan una «convicción de que las riquezas naturales de América Latina y el Caribe son una reserva estratégica del capital estadounidense».
Ante la amenaza de un bloqueo naval, el PCV hizo un llamado a la solidaridad internacional, pidiendo a partidos comunistas y obreros del mundo, incluido el proletariado estadounidense, a denunciar lo que consideran una ofensiva neocolonial contra Venezuela y América Latina.
Luego de la incautación del segundo buque, Maduro alertó a América Latina y la ONU sobre el impacto que el bloqueo estadounidense generará en la «economía mundial». El 10 de diciembre, Estados Unidos había confiscado ya el primer buque, el Skipper, junto con su carga de petróleo. En total, estos dos barcos llevaban alrededor de cuatro millones de barriles de crudo venezolano.
DCN/Agencias