
Familiares y amigos de Samuel Colina Prieto, un joven de 23 años oriundo del sector Amparo en el municipio Rosario de Perijá, estado Zulia, han manifestado su dolor y exigido justicia tras su asesinato en México. Samuel había emigrado recientemente en busca de mejores oportunidades laborales.
Las circunstancias del crimen aún no están claras, y las autoridades mexicanas no han emitido un informe oficial sobre el lugar ni las causas del hecho. Hasta el momento, no se han llevado a cabo detenciones ni se han dado a conocer avances en la investigación, lo que ha generado inquietud entre organizaciones de migrantes y defensores de derechos humanos sobre la seguridad de los venezolanos en el exterior.
Los allegados recuerdan a Samuel como un joven trabajador, alegre y lleno de sueños, cuya existencia fue truncada por la violencia. Este caso se suma a un número creciente de incidentes violentos que han afectado a migrantes venezolanos, fortaleciendo la necesidad de un mayor acompañamiento consular y medidas de protección para quienes buscan un futuro mejor fuera de sus fronteras.
DCN/Agencias