
María José Ardila, de 23 años y madre de un bebé de 10 meses, estaba celebrando su cumpleaños en el oeste de Cali con amigas, cuando la noche se tornó trágica.
Según sus familiares, María José salió a comer antes de dirigirse a una discoteca bar, donde participó en un concurso que incluía seis desafíos de consumo de licor. El primer reto consistía en beber un trago llamado «Cucaracho doble» en cinco segundos, y el último implicaba consumir ocho shots diferentes mediante un pitillo. El premio, inicialmente de un millón y medio de pesos, se elevó luego a dos millones.
Durante el último reto, logró tomar solo tres shots antes de desmayarse. Testigos afirmaron que alcanzó a comentar que el último trago le había sabido «horrible» antes de caer inconsciente. Sus amigas trataron de ayudarla, pero no lograron conseguir un taxi. La joven comenzó a convulsionar, vomitó y sufrió una broncoaspiración que le colapsó un pulmón. Pasaron 17 minutos sin que pudiera respirar.
Andrés Ardila, su padre, relató que en el hospital, los médicos la reanimaron tres veces, pero finalmente quedó en estado de muerte cerebral. El 30 de octubre, la familia decidió desconectarla. “Cayó desmayada, se broncoaspiró y ya no respiraba”, comentó el padre.
María José era estudiante de ingeniería agroindustrial en la Universidad de San Buenaventura y trabajaba con su padre, dueño de una empresa de condimentos. Su anhelo era reunirse con su esposo en Estados Unidos para criar juntos a su hijo.
La familia organizó una velatón el 1.º de noviembre a las 3:00 p.m. en el parque de las Banderas, en el sur de Cali, como homenaje a la joven.
La Secretaría de Salud de Cali anunció que está llevando a cabo inspecciones a bares y sitios de venta de licor tras confirmar que María José sufrió intoxicación por alcohol. Su objetivo es garantizar la seguridad en el consumo de bebidas alcohólicas en la ciudad.
La discoteca Sagsa Bar emitió un comunicado lamentando los hechos y expresando su solidaridad hacia la familia, ofreciendo su apoyo en la situación.
DCN/Agencias