¡Escándalo en Miss Universo! Propietario desmiente acusaciones de fraude en el certamen y amenaza con acciones legales a la prensa.
¡Escándalo en el mundo del glamour! El magnate Raúl Rocha, presidente y copropietario de Miss Universo, ha salido de su letargo y ha desatado una tormenta de declaraciones tras las acusaciones de fraude que rodean la coronación de la deslumbrante Fátima Bosch, la reciente Miss Universo de México.
Este lunes, Rocha se plantó firme en Instagram, arremetiendo contra los medios que se atreven a cuestionar la pulcritud del certamen, anunciando incluso acciones legales para poner freno a lo que él califica como un ataque vil y difamatorio. Después de todo, ¿quién necesita enemigos cuando puedes tener a la prensa al acecho?
El enigma se enreda aún más al descubrir que el padre de Fátima, Bernardo Bosch Hernández, ocupa un puesto destacado en Pemex, la petrolera estatal mexicana. Rocha no se amedrantó y destapó un millonario vínculo: su empresa, Soluciones Gasíferas del Sur, firmó un jugoso contrato de 40 millones de dólares con Pemex, justo un mes después de que Bosch ascendiera en la dirección.
Pero eso no es todo; el empresario dejó claro que la compra de su parte en Miss Universo ocurrió en enero de 2024, un año después de su colaboración con la gigante petrolera. Desde Pemex, también se deslizó que “no hay injerencia en Miss Universo”, asegurando que la felicitación a Fátima fue solo un eco de la euforia nacional por su triunfo. ¿Coincidencia o un telón de fondo más turbio?
Y aquí es donde la trama se intensifica: el pianista Omar Harfouch, quien renunció como juez del concurso, ha encendido el debate, alegando falta de transparencia y acusando un «escándalo de voto secreto». En el paroxismo de su furia, ha tildado a Fátima como “una miss universo de mentira” y ha prometido llevar a Miss Universo a los tribunales por presunta corrupción. ¡Drama en cada esquina!
Este río revuelto de acusaciones y defensas ha creado un espectáculo digno de un guion de cine. Rocha no se quedará de brazos cruzados, y la polémica sigue creciendo. La pregunta es: ¿podrá la corona de Fátima resistir tanto estrépito mediático? La belleza y el drama parecen entrelazarse en este electrizante certamen. ¡Estaremos atentos a cada movimiento!
DCN/Equipo de Farándula
