
En un momento crucial de la temporada, Máximo Acosta ha decidido dejar a los Tiburones de La Guaira, que actualmente luchan por alcanzar el cuarto lugar en la tabla de la LVBP. El equipo costero se encuentra en el sexto puesto, a solo dos juegos de distancia de Caribe de Anzoátegui, que está empatado en récord de victorias y derrotas, aunque con mejor diferencia de carreras.
Acosta, quien ha sido un pilar importante en el club, explicó su difícil decisión en declaraciones al Canal I antes del partido contra los Navegantes del Magallanes en el Estadio José Bernardo Pérez de Valencia. “No ha sido una decisión fácil. Mi esposa, Yibely, está embarazada, y mi familia siempre será mi prioridad. Ser padre es más importante que mi carrera”, comentó.
El beisbolista había planeado cumplir con la cantidad de 30 juegos exigidos, pero enfrentó dificultades con su visa de trabajo estadounidense, que está a punto de vencer. “Si me quedo, corro el riesgo de perderme el nacimiento de mi hijo, y eso es algo que no quiero”, añadió Acosta.
Así, el infielder se marcha antes de lo previsto, a pesar de su compromiso inicial, que incluía una cláusula de los Marlins de Miami, su equipo en las Grandes Ligas, para jugar una cantidad específica de partidos en la liga venezolana. Se menciona que, probablemente, no viajará con el equipo a Puerto La Cruz, lo que podría significar su despedida en el Estadio Universitario durante su partido número 23 de esta campaña.
Con la salida de Acosta, los Tiburones no han perdido tiempo y ya han hecho ajustes en su plantilla. La gerencia ha decidido incorporar a Yangervis Solarte a partir de la próxima semana, justo a tiempo para la sexta semana del campeonato. Este movimiento busca llenar el vacío que deja Acosta y mantener la competitividad del equipo en su búsqueda de los playoff.
La afición de La Guaira espera que estos cambios resulten en un revulsivo positivo, mientras se preparan para ver cómo esta historia se desarrolla en las próximas semanas.
DCN/Agencias