
El presidente Donald Trump ha decidido cancelar los esfuerzos diplomáticos para llegar a un acuerdo con Venezuela, según informaron funcionarios de su administración. Esta decisión podría facilitar una escalada militar enfocada en el narcotráfico y el gobierno de Nicolás Maduro.
El enviado especial, Richard Grenell, había estado negociando con Maduro y otros altos funcionarios venezolanos. Sin embargo, en una reunión con líderes militares, Trump instruyó a Grenell a que terminara toda comunicación diplomática, incluyendo las conversaciones con Maduro.
La frustración de Trump ha aumentado debido a la negativa de Maduro a renunciar y a las insistencias del gobierno venezolano de no estar involucrado en el narcotráfico. La administración estadounidense ha preparado varios planes militares que pueden incluir acciones para destituir a Maduro. Marco Rubio, secretario de Estado y asesor de seguridad nacional, ha calificado a Maduro como un líder «ilegítimo» y ha mencionado una acusación formal de narcotráfico en su contra, aumentando la recompensa por su captura a 50 millones de dólares.
Un funcionario de la Casa Blanca comentó que Trump está dispuesto a usar todos los recursos disponibles para detener el tráfico de drogas hacia Estados Unidos y que ha dejado claro su mensaje a Maduro sobre la necesidad de frenar el narcotráfico.
Grenell y un alto funcionario venezolano no comentaron sobre la situación. Los aliados de Rubio han estado promoviendo una estrategia de expulsión de Maduro y afirman que el mandatario venezolano dirige cárteles de droga, una acusación que el gobierno venezolano niega.
Recientemente, el ejército estadounidense atacó una embarcación en aguas internacionales cerca de Venezuela, lo que resultó en la muerte de cuatro personas. Este fue el cuarto ataque conocido contra embarcaciones implicadas en el narcotráfico.
Maduro había enviado una carta a Trump negando las acusaciones sobre el narcotráfico y proponiendo continuar las negociaciones a través de Grenell. Sin embargo, algunos miembros de la administración consideran que los esfuerzos diplomáticos fueron confusos e ineficaces.
En una notificación al Congreso, el gobierno de Trump describió la situación como un «conflicto armado» con los cárteles de la droga, considerándolos organizaciones terroristas. Esto sugiere un aumento en las operaciones militares, con la posibilidad de que Trump autorice ataques contra objetivos de los cárteles en México, aunque los detalles no están claros.
Defensores de la diplomacia dentro de la administración temen que una expansión de las operaciones en Venezuela podría llevar a un conflicto a gran escala, algo que se busca evitar.
DCN/Agencias