El presidente de Colombia, Gustavo Petro, emitió un mensaje el 11 de octubre en un intento de distanciarse del régimen de Nicolás Maduro, tras la controversia generada por sus recientes declaraciones sobre María Corina Machado, recientemente premiada con el Nobel de la Paz.
En su mensaje, Petro afirmó: «Yo no defiendo a Maduro», lo que ha sido interpretado como un intento tardío de aclaración después de criticar a Machado, a quien cuestionó sobre una supuesta alianza con el «criminal contra la humanidad» Benjamín Netanyahu. Esta acusación se produjo justo después del anuncio histórico de Oslo que reconoció a Machado.
La crítica de Petro fue recibida como un intento de deslegitimar a Machado, una figura clave en la oposición venezolana, lo que generó reacciones en su contra. En medio de las críticas, Petro envió una nueva carta que combina rectificación y reafirmación, insistiendo en que Machado debe distanciarse de «Netanyahu y sus amigos nazis».
Petro también advirtió que cualquier invasión a Venezuela tendría consecuencias nefastas para toda Latinoamérica, afirmando que Colombia se ofrece como garante del diálogo entre venezolanos y que nunca apoyará una invasión a la región.
Pese a sus esfuerzos por reposicionarse como un mediador, muchos analistas consideran que sus ataques a Machado han situado a Petro en una posición impopular ante la comunidad democrática internacional. Aún así, el presidente continúa insistiendo en su papel de pacificador en la región.
DCN/Agencias