En una curiosa y lamentable situación, el jardín botánico Rombergpark de Dortmund, Alemania, reportó el robo de una planta inusual: una flor aro gigante, conocida como ‘Amorphophallus titanum’ y apodada “David”. Este tubérculo, que ronda entre los 20 y 30 kilogramos, fue desenterrado de su maceta por los delincuentes, quienes no dejaron huella de su paso.
Las autoridades alemanas han presentado una denuncia formal tras el incidente, mientras que el equipo del jardín no oculta su decepción. Califican el robo como una pérdida “irreparable”, dada la expectativa que generaba la próxima floración de esta planta única.
La A. titanum es famosa no solo por ser la flor más grande del mundo, sino también por su fuerte olor a carne en descomposición, un aroma que atrae a insectos vitales para su polinización. Aunque su valor económico es difícil de cuantificar, el staff del jardín destaca que para Dortmund esta pérdida significa mucho en términos científicos y simbólicos.
La flor de “David” solo florece cada varios años y su espectáculo dura pocos días, lo que convierte cada aparición en un evento singular, capaz de atraer a multitudes. En sus anteriores florecimientos, en 2018 y 2021, el interés fue enorme, con miles de visitantes fascinados por su rareza y peculiar belleza.
Así, la historia de “David” se vuelve un eco de la peculiaridad de la naturaleza y de cómo puede atraer tanto admiración como controversia. Los amantes de la botánica en Alemania y del mundo esperan con ansias su próxima floración, aunque ahora, con la incertidumbre de qué será de esta emblemática planta robada.
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DCN/Agencias