
Los organizadores de la Global Sumud Flotilla denunciaron este jueves la falta de información sobre el paradero de 443 participantes de una misión humanitaria interceptada en aguas internacionales por la Armada Israelí, mientras se acercaban a la Franja de Gaza.
La misión calificó de «nuevos actos de agresión contra civiles desarmados» la intervención israelí, indicando que los voluntarios fueron atacados con cañones de agua y rociados con agua contaminada. Además, reportaron interferencias en sus comunicaciones desde la noche del miércoles.
Tras la intercepción, los organizadores afirmaron que los abogados que representan a los participantes ante las autoridades israelíes han recibido información muy limitada. No se ha aclarado si los aproximadamente 443 activistas serán llevados a Ashdod, donde se espera que enfrenten cargos de «detención ilegal».
La flotilla señaló que interceptar embarcaciones humanitarias en aguas internacionales constituye un crimen de guerra. También advirtieron que negar asistencia legal y ocultar el destino de los detenidos agrava esta situación.
Entre los detenidos se encuentran al menos 40 españoles, 35 italianos, 32 turcos, 21 malasios, 25 tunecinos, 12 brasileños, 31 franceses y 20 estadounidenses, así como participantes de Reino Unido, Alemania, México y Colombia.
La Armada Israelí interceptó casi la totalidad de los 44 barcos que se dirigían hacia Gaza, excepto el ‘Marinette’, de bandera polaca, que sigue en comunicación con la organización y lleva seis pasajeros. Por su parte, el ‘Mikeno’, de bandera francesa, logró entrar en aguas territoriales pero ha perdido contacto.
DCN/Agencias