Enfermera de la Cruz Roja Venezolana, María Teresa Párima, ha recibido un reconocimiento internacional por su labor en el campo de la enfermería. A sus 94 años, Párima se mantiene activa como directora del Departamento de Enfermería del Hospital Carlos J. Bello, donde ha dedicado su vida al cuidado de las personas más necesitadas y a la formación de nuevas generaciones de profesionales.
Durante una ceremonia, Luis Farías, presidente de la Cruz Roja Venezolana, remarcó la relevancia de su trayectoria al señalar que su nombre quedará grabado en la historia de la institución. La Medalla Florence Nightingale, que le ha sido conferida, es un galardón que el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) otorga a enfermeros con una dedicación excepcional en contextos humanitarios. Valérie Aubert, jefa de CICR en Venezuela, subrayó que Párima representa los valores de compasión y coraje en su desempeño.
Este reconocimiento fue creado en 1912 y se entrega cada dos años a profesionales destacados en ética y formación dentro del ámbito de la enfermería. La carrera de Párima inició en la Escuela Municipal de Enfermería, de donde se graduó en 1951 gracias a una beca. Su experiencia incluye atención durante desastres naturales como el deslave de Vargas y el terremoto de Caracas, así como su participación activa en la lucha contra la pandemia de COVID-19.
Durante su discurso, Párima destacó que este premio es un logro que comparte con todos los enfermeros y voluntarios de la Cruz Roja, reafirmando así el espíritu colectivo de su trabajo. La ceremonia celebrada en el Centro Cultural Chacao concluyó con un aplauso sostenido de pie y una conmovedora interpretación de la Orquesta Sinfónica Ayacucho.
El legado de María Teresa Párima no solo resalta su compromiso con la enfermería, sino que también inspira a futuras generaciones a continuar con la vocación humanitaria y el liderazgo en el campo de la salud en Venezuela.
DCN/Agencias