El arzobispo de Caracas, Raúl Biord, celebró este jueves en Roma la canonización de José Gregorio Hernández y la religiosa Carmen Rendiles, quienes se convertirán en los primeros santos de Venezuela. Biord calificó el evento como “una causa país” y un “momento de esperanza”.
“Venezuela vive una gran alegría porque ya tenemos nuestros primeros santos. Si ellos alcanzaron esta santidad, también podemos aspirar a ser santos”, sostuvo el prelado. Resaltó que la canonización es un motivo de alegría profunda y una victoria espiritual para los fieles venezolanos. “Estamos muy felices con esta gran victoria: ahora están con Dios”, agregó.
La ceremonia, que será presidida por el papa León XIV el domingo en el Vaticano, espera congregar a miles de creyentes y peregrinos de distintas partes del mundo. Biord destacó que estos dos santos representan los máximos valores de la solidaridad y el compromiso del pueblo venezolano.
Acerca de José Gregorio Hernández (1864-1919), mencionó su vocación como “médico de los pobres”. En cuanto a Carmen Rendiles (1903-1977), subrayó su dedicación a la educación y la fe, definiéndola como una “educadora y fundadora de escuela”.
El arzobispo expresó que la devoción popular hacia Hernández es notable, con su nombre presente en talleres, hospitales y comercios a lo largo del país. “Nos sentimos orgullosos porque son compatriotas que han aportado lo mejor a la humanidad, y ahora han sido elevados a los altares”, concluyó Biord.
La celebración ha atraído peregrinos de lugares como Australia, Estados Unidos y Chile, mostrando la transcendencia del evento, incluso entre migrantes que llevan consigo el legado de José Gregorio.
DCN/Agencias