Un hombre, en evidentes condiciones de embriaguez y vestido con chanclas, decidió unirse de manera inesperada a un maratón que se llevó a cabo en Brasil. A pesar de su indumentaria poco convencional, logró recorrer 8 kilómetros y logró superar a varios competidores que habían entrenado para la ocasión.
Aunque no logró un lugar en el podio, los organizadores del evento le otorgaron una medalla, al igual que a los demás participantes. Este episodio rápidamente se volvió viral en las redes sociales, generando gran curiosidad entre los usuarios respecto a la manera en que el hombre se integró a la competencia y su sorprendente rendimiento.
La historia del corredor improvisado ha captado la atención de muchos, convirtiéndose en un tema de conversación y diversión en internet.
DCN/Agencias