El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, aseguró este viernes que no tiene “prisa” por tomar medidas en respuesta a los aranceles del 50 % aplicados por Estados Unidos a productos brasileños, reiterando que su gobierno está dispuesto a dialogar.
Estas declaraciones surgen tras la directriz del Ministerio de Relaciones Exteriores de evaluar si se puede aplicar la ley de reciprocidad contra EE. UU. La secretaria de Comercio Exterior, Tatiana Prazeres, indicó que la estrategia busca fortalecer la posición de Brasil en las negociaciones, sin adoptar medidas inmediatas.
“Este es un proceso que lleva tiempo”, expresó Lula en entrevistas con medios locales. Añadió que es importante comunicar a EE. UU. que Brasil también tiene opciones, aunque su intención principal es negociar.
La administración brasileña ha intentado abrir canales de diálogo, incluyendo una carta enviada en mayo que aún no ha sido respondida. Prazeres destacó que cualquier contramedida requeriría un proceso extenso y consultas con EE. UU.
Los aranceles afectan productos clave como el café y la carne, mientras que exportaciones sensibles como el jugo de naranja y aviones fueron exentas. Washington justificó esta decisión al señalar prácticas comerciales desleales y acusar a Brasil de perseguir al expresidente Jair Bolsonaro, quien enfrenta investigaciones por presunta conspiración para un golpe de Estado.
La postura de Lula sugiere un enfoque pragmático para evitar un conflicto comercial inmediato con Estados Unidos, en tanto prepara a Brasil para futuras negociaciones en mejores condiciones.
DCN/Agencias