En los últimos días, TikTok ha sido escenario de una nueva tendencia denominada «Ojitos mentirosos», caracterizada por videos donde las personas lucen sus rostros pintados de payasos y presentan imágenes de estilo cinematográfico en sus entornos. La música que predominantemente acompaña estos clips es la canción “Ojitos mentirosos”, interpretada por el cantante mexicano Chino Pacas.
Esta canción ha escalado rápidamente en las listas de reproducción, tanto en TikTok como en Spotify, donde se ha posicionado entre las más escuchadas. En uno de los clips más virales, una joven con cara de payaso ha alcanzado más de 10 millones de vistas.
Los usuarios de la plataforma han manifestado curiosidad por entender la razón detrás de la popularidad de esta estética. La respuesta se relaciona con múltiples factores; aunque Chino Pacas es el artista del momento, “Ojitos mentirosos” fue escrita en 1973 por Coré Cuestas Chacón, jerarca del grupo peruano Los Ecos y autor de “Amor prohibido”, un éxito de Selena Quintanilla. La letra de la canción gira en torno a un romance lleno de desconfianzas y mentiras.
La tendencia actual da un giro a la utilización de la canción, ya que los jóvenes la emplean para retratar sus comunidades, enfocándose en lugares poco frecuentados por el turismo y en aspectos de la vida diaria que suelen ocultarse en las redes sociales.
El estilo de las presentaciones sigue el hilo de la película mexicana «Chicuarotes» (2019), dirigida por Gael García Bernal, que cuenta la historia de dos jóvenes en busca de una vida mejor, quienes se ven envueltos en un ciclo de violencia y crimen. En una escena emblemática, intentan entretener en un autobús, pero su búsqueda de reconocimiento los lleva a un camino delictivo.
La incorporación de esta estética en TikTok no es solo una cuestión de entretenimiento; también tiene un matiz político. Las imágenes cinematográficas resaltan realidades de precariedad y exclusión, buscando visibilizar lo que subyace en las ciudades, más allá de las apariencias. Esta tendencia, originada en México, ha viajado a otras naciones latinoamericanas, donde incluso comunidades migrantes han adoptado la canción para mostrar una perspectiva alternativa de las capitales europeas.
DCN/Agencias