Los precios del petróleo comenzaron la semana con caídas, alcanzando su nivel más bajo en siete días, tras el anuncio de la OPEP+ sobre un aumento en su bombeo para septiembre. Esto sucede en un contexto donde el mercado sigue siendo vulnerable a tensiones geopolíticas y la política comercial de Estados Unidos.
A las 11:27 GMT, el crudo Brent cayó 1,17 dólares (-1,7%), colocándose en 68,50 dólares por barril, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) disminuyó 1,26 dólares (-1,9%), situándose en 66,07 dólares. La semana pasada, ambos contratos ya habían registrado una baja cercana a dos dólares.
El grupo OPEP+ decidió el domingo incrementar la producción en 547.000 barriles diarios (bpd) para el próximo mes. Esta acción devuelve casi en su totalidad el recorte de 2,5 millones de bpd que se había establecido para estabilizar los precios durante la crisis, representando un 2,4% de la demanda mundial.
Tamas Varga, analista de la consultora PVM, indicó que esta decisión está ejerciendo presión sobre los precios y comentó sobre la posible discusión del bloque sobre la eliminación de otros 1,65 millones de bpd de recortes.
Goldman Sachs, por su parte, estima que el incremento real en la oferta de los ocho países de la OPEP+ que han aumentado su producción desde marzo podría alcanzar los 1,7 millones de bpd, dado que otros miembros han tenido que ajustar su producción para compensar.
El mercado también sopesando el impacto de recientes aranceles impuestos por Estados Unidos y la posibilidad de nuevas sanciones energéticas a Rusia. Varga mencionó que en el mediano plazo, los precios del petróleo estarán influenciados por esta combinación de factores.
DCN/Agencias