Caracas, 2 de junio de 2025. Habitantes de Caracas, como Jossymar, exigen la regularización del servicio de agua. Cada miércoles, Jossymar realiza su rutina de limpieza en casa, llenando dos pipotes antes de activar un filtro en su fregadero para purificar el agua que llega a su hogar.
El agua que recolecta es turbia y presenta mal olor. A pesar del uso del filtro, al hervirla aparecen sedimentos. Jossymar desconfía de las cisternas, pues ha observado que el agua a menudo contiene impurezas.
Residente en El Cuartel de Catia, en la parroquia Sucre, indica que el agua solo llega los miércoles y se va para el domingo. La situación es irregular; si falla el sistema Tuy, los retrasos son comunes, lo que a menudo afecta el suministro.
Un estudio del Observatorio de Servicios Públicos revela que solo el 27% de la población recibe agua por tubería, mientras que el 9% lo hace una vez al mes. Esta escasez ha propiciado que vecinos ofrezcan agua filtrada. Según el informe de HumVenezuela 2022, el 73% de los venezolanos está expuesto a agua potencialmente contaminada, y 4,4 millones carecen de métodos para purificarla.
Expertos han descartado la presencia de patógenos en el agua, pero advierten sobre problemas que amenazan su seguridad. Atribuyen esto a la irregularidad del suministro y prácticas inadecuadas de almacenamiento que afectan su potabilidad. Un estudio del Observatorio en 2023 indica que el 64% de los habitantes califica negativamente la calidad del agua, destacando su mal olor y color amarillento.
Se recomienda al Estado reactivar el servicio y desaconsejan el uso de purificadores sin asesoría técnica.
DCN/Agencias