El presidente de Colombia, Gustavo Petro, solicitó investigar la disminución del esquema de seguridad del senador y precandidato presidencial Miguel Uribe, quien recibió varios impactos de bala durante un mitin en Bogotá, y se encuentra en estado crítico. Según Petro, la protección del senador se redujo de siete a tres personas el mismo día del atentado.
A través de su cuenta en la red social X, Petro resaltó que existen numerosas hipótesis sobre el incidente, pero expresó su descontento con que se utilice este acto de violencia con fines electorales. Indicó que ha notado una conducta prudente de algunos opositores, mientras que otros actúan de manera irresponsable.
El mandatario reafirmó su compromiso con su mandato de paz y justicia social, y lamentó que algunos contradictores no comprendan que el camino hacia la paz también implica alcanzar justicia social. Además, mencionó que su vida está amenazada por fuerzas malignas, y aseguró que incluso se ha solicitado al Mossad que realice una operación de extracción en su contra.
El secretario general de la ONU, António Guterres, condenó el atentado y deseó una pronta recuperación a Uribe, expresando su apoyo a su familia y al pueblo colombiano. Guterres afirmó que este acto de violencia política debe ser investigado a fondo, y que los responsables deben ser llevados ante la justicia. También instó a avanzar hacia unas elecciones pacíficas para fortalecer la democracia en el país.
Uribe fue intervenido de urgencia tras recibir dos disparos por la espalda en el barrio Modelia de Bogotá, y los médicos han señalado que su estado es grave. Hasta ahora, se ha detenido a un menor de 15 años, principal sospechoso del ataque, quien portaba un arma de fuego tipo pistola Glock. Cuatro agentes que eran escoltas de Uribe están bajo procedimiento disciplinario y deberán declarar ante la Fiscalía para determinar posibles irregularidades en el operativo de seguridad.
DCN/Agencias