La violencia en el noreste de Nigeria ha ido en aumento desde 2016, particularmente por ataques de grupos yihadistas. Según el portavoz de la Policía del estado, Nahum Daso, «una mujer atacante suicida, con un dispositivo explosivo improvisado atado a su cuerpo, se infiltró en una multitud de civiles y detonó el artefacto, lo que ocasionó la muerte de 12 personas y dejó 18 heridos graves».
La atacante, que se disfrazó de cliente en un puesto de comida en el mercado, murió en el ataque. Los heridos fueron trasladados al hospital para recibir atención médica. Daso agregó que aún no se ha confirmado la autoría del ataque, aunque se sospecha de grupos yihadistas que operan en el área de Borno, ya que son conocidos por utilizar artefactos explosivos caseros y ataques suicidas contra civiles.
Las autoridades han movilizado a la Policía y personal de seguridad a la zona para restablecer la calma. La investigación del incidente continúa. Estos grupos yihadistas buscan establecer un Estado islámico en Nigeria, donde coexisten una mayoría musulmana en el norte y una población predominantemente cristiana en el sur.
DCN/Agencias