Valencia, 13 de mayo de 2025 – Alrededor del 83% de las universidades públicas en Venezuela presentan daños significativos en su infraestructura, según el más reciente informe del Observatorio de Universidades (OBU). Este deterioro afecta las condiciones educativas de los estudiantes.
El OBU reporta que el estado de estas universidades se ha vuelto una de las mayores preocupaciones dentro de las comunidades académicas, describiendo desprendimientos de techos, problemas con colapsos en el sistema de desagües y otros inconvenientes graves. La situación se ve agravada por la escasez de recursos, especialmente con la llegada de la temporada de lluvias.
La raíz del deterioro, según el OBU, radica en la falta de financiamiento que enfrentan estas instituciones desde hace al menos diez años, lo que ha impedido el mantenimiento estructural adecuado. La insuficiencia de inversión pone en riesgo la seguridad y funcionalidad de los espacios educativos.
A pesar de programas gubernamentales como "Universidad Bella" y algunos esfuerzos de alcaldías y gobernaciones, estos no han logrado ofrecer una solución efectiva. La continua falta de inversión y planificación ha dejado a las universidades en una situación precaria, afectando la calidad de la educación y el bienestar de la comunidad académica.
Además, el OBU expresa su preocupación por el deterioro de las condiciones laborales de los trabajadores universitarios, destacando la falta de atención por parte del gobierno. Comparativamente, los docentes venezolanos reciben un salario un 113% inferior al de sus homólogos cubanos; en 2025, un profesor titular gana solo 8 dólares al mes, en contraste con los 2456,12 dólares de 2021. En el primer trimestre del año, se registraron más de 34 denuncias relacionadas con violaciones a los derechos económicos de los docentes y trabajadores universitarios.
DCN/Agencias