El 10 de mayo, Pakistán inició una operación militar contra India, realizando ataques con misiles que alcanzaron posiciones estratégicas en el territorio indio. Esta acción se da como respuesta al ataque aéreo de India del miércoles anterior, que resultó en la muerte de al menos 26 civiles en Pakistán.
El Ejército paquistaní, a través de su oficina de prensa, anunció el comienzo de esta operación de represalia, denominada ‘Bunyan Marsoos’. Fuentes militares confirmaron que los objetivos de los ataques incluyeron una base aérea en Udhampur, un aeródromo en Pathankot y un centro de almacenamiento en Beas, Punjab. Esta serie de ofensivas busca que Pakistán reafirme su postura frente a lo que considera «agresión india».
En respuesta a la escalada de violencia, la Autoridad de Aeropuertos de Pakistán cerró su espacio aéreo a vuelos comerciales desde las 3:15 a.m. (hora local) hasta las 12:00 p.m. de ese mismo día. Esto acontece luego de que el Gobierno pakistaní denunciara que India lanzó misiles hacia sus instalaciones militares, ataque que fue exitosamente interceptado por sus sistemas de defensa aérea.
La actual escalada marca el nivel más alto de tensión entre ambos países en más de 20 años, lo cual ha suscitado preocupación internacional sobre la seguridad en una región donde ambas naciones poseen armamento nuclear.
DCN/Agencias