Europa reduce su inversión en China tras el colapso del mercado inmobiliario

Europa está reduciendo sus inversiones en China. La economía del gigante asiático, afectada por una prolongada crisis inmobiliaria que ha limitado el gasto de los consumidores, enfrenta una creciente resistencia de Europa y Estados Unidos respecto a la importación de productos chinos.

Según la Cámara de Comercio de la Unión Europea en China, en su reciente Encuesta de Confianza Empresarial 2025, «el panorama se ha deteriorado en muchos parámetros clave». Las empresas chinas, que a menudo reciben subsidios del gobierno, han hecho grandes inversiones en sectores como el de vehículos eléctricos, lo que ha generado un exceso de capacidad en la producción.

Esta saturación ha dado lugar a guerras de precios que disminuyen márgenes de ganancia y ha impulsado a las empresas hacia otros mercados internacionales. En Europa se teme que el aumento en las importaciones chinas afecte a sus propias fábricas y a los empleos de sus trabajadores. En 2022, la UE impuso aranceles a vehículos eléctricos provenientes de China, argumentando que la producción china era injustamente subvencionada.

El presidente de la Cámara de la UE en China, Jens Eskelund, comentó que «existe una clara percepción de que los beneficios de la relación bilateral no se distribuyen equitativamente». Aunque reconoció los esfuerzos de China por aumentar el gasto de los consumidores, destacó la necesidad de que el gobierno tome medidas para equilibrar el crecimiento de la oferta y la demanda. Los resultados de la encuesta revelan que la presión sobre los beneficios ha aumentado y que la caída de la confianza empresarial continúa empeorando. Casi 500 empresas respondieron a esta encuesta entre enero y febrero. Eskelund señaló que «en este momento, todo el mundo enfrenta grandes dificultades en un entorno de márgenes decrecientes».

Con información de Euronews.

DCN/Agencias