El expresidente uruguayo, José ‘Pepe’ Mujica, expresó su «desilusión» por la situación actual de los gobiernos de Nicaragua y Venezuela, según comentó el presidente dominicano, Luis Abinader. Esta declaración se produjo durante una visita que Abinader realizó a Mujica en su hogar, situado en las afueras de Montevideo, tras asistir a la investidura del nuevo presidente uruguayo, Yamandú Orsi, el fin de semana pasado.
Abinader, quien se refirió a Mujica como un «gran demócrata» y un «gran humanista», compartió que el exmandatario uruguayo lamentaba la situación política de ambos países. Durante la visita, Mujica instó a fortalecer los partidos políticos, la institucionalidad y la democracia, a la vez que aconsejó a los dominicanos no confiar en figuras que prometan soluciones mágicas.
El presidente de la República Dominicana, en una rueda de prensa semanal, comentó que había encontrado a Mujica en mejor estado de salud de lo esperado y destacó su claridad mental. Abinader mencionó que Mujica se define a sí mismo como un «estoico» en términos filosóficos.
En julio del año pasado, Venezuela rompió relaciones con varios países latinoamericanos, incluyendo a República Dominicana, argumentando que estos emitieron «declaraciones injerencistas» tras las elecciones en las que Nicolás Maduro fue reelegido por un nuevo periodo de seis años.
El gobierno de Venezuela sostuvo que se reserva «todas las acciones legales y políticas» para defender su derecho a la autodeterminación. Al día siguiente de las elecciones, gobiernos de Uruguay, Argentina, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú y República Dominicana manifestaron su preocupación por el desarrollo del proceso electoral y exigieron una revisión de los resultados. Además, solicitaron una reunión urgente de la Organización de Estados Americanos (OEA).
DCN/Agencias