En un operativo efectuado en el estado Trujillo, autoridades de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) lograron la detención de 13 personas, acusadas de estar involucradas en un plan destinado a sembrar violencia en las calles mediante acciones de carácter político. Las aprehensiones se realizaron en diversos municipios tras múltiples procedimientos, durante los cuales fueron confiscados armamento, dispositivos electrónicos y materiales peligrosos. Las personas arrestadas enfrentan cargos por incitación al odio y porte ilícito de armas.
### Operativos en Pampanito
El primer operativo tuvo lugar en el municipio de Pampanito, donde se detuvo a seis individuos. Robert Emilio Rea Fernández fue el primero en ser aprehendido, capturado cerca de la alcaldía mientras tomaba fotografías del lugar. Durante la detención, los efectivos encontraron un revólver Smith & Wesson calibre .38, dos cartuchos, cuatro morteros, un litro de gasolina y un teléfono móvil. Esta intervención dio paso a la captura de otras cinco personas en la urbanización La Floresta de Pampanito, todas acusadas de incitación al odio y porte de armas.
Los detenidos fueron entregados al Ministerio Público para que enfrenten los cargos correspondientes.
### Arrestos en Boconó
Simultáneamente, en Boconó, las autoridades arrestaron a siete personas en la avenida Bolívar, bajo la acusación de incitar al desorden público. En su poder, se les incautaron siete litros de gasolina, tres artefactos incendiarios (bombas molotov), miguelitos y pintura verde, la cual era utilizada para grafitis en las cercanías de un módulo policial. Los arrestados se identificaron como Isaac Manuel Uzcátegui Aponte, Brayan David Ángel Laguna, Abrahán Javier Rivero Yépez, Gerardo Antonio Camacho, Francisco Javier Uzcátegui, Miguel Ángel Rojas Gil y Nereida Josefina Briceño Camacho. Según el informe de la GNB, estos individuos estaban organizando ataques dirigidos a las autoridades locales.
### Consecuencias Legales
Las autoridades del estado Trujillo han indicado que estas detenciones están enmarcadas dentro de una investigación más amplia sobre posibles actividades de conspiración contra el orden público. Los detenidos enfrentan serios cargos, entre ellos la incitación al odio y el porte ilegal de armas, lo que podría conllevar severas penas si se establece su implicación en los hechos denunciados.
El Ministerio Público sigue indagando los aspectos de los planes violentos, con el objetivo de esclarecer el contexto detrás de estos actos y su posible conexión con intereses políticos.
DCN/Agencias