No te desanimes, hay esperanza creíble y veraz. Por José Pons

Al pasearnos por los ámbitos internacional y nacional, la preocupación crece en virtud de las calamidades que se muestran y como las sociedades no logran atinar a derroteros que permitan lograr un equilibrio de vida en el cual los ciudadanos, las familias y las comunidades puedan encontrar el desarrollo de vidas  colmadas de éxitos, bonanzas, salud y una vida digna. Realmente asumimos con gran fe, lo señalado por Cristo en la Biblia, “hoz dejo la Paz, no como la ofrece el mundo sino como la doy yo”

Las fuertes presiones que provienen de exterior de nuestro país, son intensamente preocupantes y no deja de preocuparnos como los venezolanos y nuestra realidad  terrible sacude nuestras almas todos los días. Como si fuera poco la ausencia de Justicia, democracia, libertad y un irrespeto a los DDHH socaba el día a día. Lo importante es entender que hay que buscar nuevas vías con fundamentos y no pretender creer que los que ocasionaron todos estos males de lado y lado del estamento político podrán solucionar tales males.

Muchos pensamos en la actual oposición venezolana con profunda tristeza y repudio. Del gobierno más todavía, al observar como los eventos de corrupción  se logran tapar con otros más perversos que el descubierto, 3000, 24000 y 48000 mil millones de dólares extraídos para decirlo menos atroz de PDVSA, esta ha mostrado que esa “gallinita de los huevos de oro” fue excelentemente construida por hombres y mujeres en los años de la incipiente democracia venezolana y fue un producto bien hecho en Venezuela. Presidentes con visión de Patria, como Betancourt, Leoni y el indiscutible Carlos Andrés Pérez entre otros tendrán nuestro eterno agradecimiento.

Ahora lo pasado, pasado queda. Que haremos en esta nación rodeada de una crisis existencial mundial y como afirma con tanta claridad Bauman (2016) es su teoría del “Modernismo Liquido” donde la sociedad se diluye constantemente, causando males aparentemente irreparables para esta generación y las que vengan. Hoy no existe una ideología o teoría del capital que nos ofrezca cambios reales a nuestra existencia. El centro del problema es el ser humano. Los ejes están desvirtuados y degenerados por tales protagonistas. Ni izquierdas ni derechas nos auguran un cambio verdadero, ¿Entonces de dónde partiremos?

Como diría un Hombre sabio, no tengamos miedo de empezar de nuevo, hoy por hoy contamos con variables que nos permiten poner el barco a flote y dirigirlo a Puerto Seguro. La política como ciencia, la Psicología en sus diferentes disciplinas, la sociología, y la referencia de la antropología nos brindan un sendero con las garantías de la exactitud científica por un lado, el otro lado, la nueva ciudadanía colmada de valores reales que defienden. Al expresar en nuestra obra El Estado Psicosocial Latinoamericano tal mezcla de realidades y valores, envuelven la esperanza como el resultado creíble de lo que podemos realizar, solo  atrevamos a surcar las nuevas rutas con la fe en Dios y en todo lo que podemos crear como gente comprometida con Venezuela y el mundo.

 

 

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