Corea del Sur aprueba presupuestos de 2023 y recorta impuesto de sociedades

La Asamblea Nacional (Parlamento) de Corea del Sur aprobó este sábado sus presupuestos generales de 2023, así como varios enmiendas fiscales para reducir el impuesto de sociedades y retrasar el impuesto sobre la renta de inversiones financieras en medio de los signos de desaceleración económica.

El gobernante Partido del Poder Popular (PPP) y la oposición dieron luz verde a los primeros presupuestos de la Administración del presidente Yoon Suk-yeol, de 638,7 billones de wones (unos 469.870 millones de euros), una aprobación que llegó 22 días después del vencimiento de la fecha límite legal, el pasado 2 de diciembre.

Los presupuestos fueron aprobados con 251 votos a favor, cuatro en contra y 18 abstenciones, en un órgano donde el opositor Partido Democrático (PD) tiene mayoría, 169 de los 300 escaños.

El monto finalmente aprobado es un 0,1 % inferior al propuesto por el Gobierno y marca la primera vez en tres años que el parlamento decide reducir el presupuesto originalmente planteado.

Los presupuestos generales surcoreanos de 2023 incluyen 352.500 millones de wones (unos 260 millones de euros) para la emisión de moneda local en el marco de un programa promovido por el líder del PD y que no se encontraba en el borrador original del Ejecutivo.

La partida destinada a la oficina de policía del Ministerio del Interior y para el personal del equipo de gestión de información del Ministerio de Justicia ha sido reducido a la mitad desde 510 millones de wones (375.000 euros), uno de los temas que ha generado más fricción entre el partido gobernante y la oposición.

Durante la sesión parlamentaria celebrada hoy también se aprobó una enmienda sobre la reducción de un punto en los cuatro tramos del impuesto de sociedades, que baja del 25 % al 24 % la tasa más alta, la primera reducción del techo superior de este impuesto desde 2017.

El Parlamento surcoreano también llegó a un acuerdo en otra enmienda para posponer dos años, hasta enero de 2025, la imposición de impuestos a las ganancias que superen los 50 millones de wones (unos 36.700 euros) en inversiones en acciones, bonos y otros productos financieros.

En virtud de la revisión de la normativa, hasta entonces el impuesto sobre las ganancias de capital se aplicarán sólo a los mayores accionistas, los que posean acciones por valor de al menos mil millones de wones (unos 735.000 euros) por tipo de acción.

Esta enmienda fiscal se produce en un momento en el que el Gobierno surcoreano está buscando formas de impulsar la inversión corporativa y animar al mercado de valores ante las señales de desaceleración económica.

Con información de EFE