Nuevos tiempos de esperanza. Por José Leonardo Caldera

Hace un año el Zulia se dio la oportunidad de poner fin a la desesperanza y al abandono, para iniciar un camino hacia su propia reconstrucción.

Un camino que debemos reconocer no ha sido fácil y aun cuando en ocasiones podemos sentir que no avanzamos de la forma que muchos anhelamos, debemos reconocer que en el Zulia se respira un aire de esperanza, aunque seguramente en los próximos años requerirá mucho esfuerzo y una mayor muestra de gallardía del ciudadano de bien.

Sin embargo veo con optimismo como la sociedad ha avanzado en el entendimiento de la compleja y apasionante vida política, que requiere el reconocimiento de los actores, lejos de las posturas radicales para poder llegar a la construcción de soluciones en conjunto, con la participación de todos los que tenemos alguna responsabilidad política en la región o que somos parte de la vida nacional del país.

Hoy en día y ante la falta de credibilidad de los políticos a nivel nacional se hace indispensable la construcción de espacios que permitan el entendimiento y la construcción de soluciones, al ciudadano de a pie ya no le interesa la postura o la búsqueda de culpables, ante la grave crisis de hoy es el país por el contrario requiere de quién hablándole con franqueza construya la esperanza responsable y haga la invitación a soñar pero al mismo tiempo a trabajar por una Venezuela de progreso.

Devolverle al ciudadano la confianza en sus autoridades es la principal tarea de quienes queremos aportar a la reconstrucción del tejido social.  Y para ello se requiere un esfuerzo intelectual por repensar las formas de participación política. Hablar con firmeza y claridad al elector es una tarea exigente pero necesaria para transitar hacia la nueva política.

Veinte años de enfrentamientos deben ser suficientes para entender que la política requiere de una nueva forma de ejercicio, una nueva orientación, que guíe hacia la transparencia del accionar individual y colectivo de la clase política.

Recuerdo de joven haber escuchado a un empresario que quería incursionar en la política zuliana comentarme con frustración lo mal que le había ido en su visita a una comunidad muy popular de Maracaibo, cuando llegó a hablar sobre sus propuesta le comentó una señora ama de casa de aproximadamente 60 años de edad, “habláis muy bonito, pero cuánto hay pa eso de apoyarte” en su momento acompañe ese sentimiento de frustración del empresario, mientras me preguntaba en silencio cómo ser honesto? Si el elector en ocasiones es el principal promotor de la deshonestidad.

Años más tarde comprendí que esa conducta de la Sra ama de casa, no era una respuesta improvisada, sino que por el contrario era la respuesta adaptativa de años de haber escuchado promesas vacías, un mecanismo de defensa sin ningún tipo de impacto en su calidad de vida.

Es por ello que la generación de políticos que logramos hace un año conquistar espacios de elección popular, debemos convertirnos en defensores de la pedagogía política para entender que en la medida que todos nos involucremos en la participación política podremos alcanzar nuevos tiempos de esperanza.

 

José Leonardo Caldera

Entérate al instante de más noticias con tu celular siguiéndonos en Twitter y Telegram
Suscribir vía Telegram

Lea también

Le puede interesar además

Loading...

Tu opinión vale...