Argentina y Colombia a los cuartos de final de la Copa América

Los cuartos de final de la Copa América volvieron a entregar una jornada llena de emociones, aunque en distintos niveles. Los ganadores del día son Argentina y Colombia que sortearon duros escollos para poner pies firmes en la semifinal del campeonato continental.

En primer término, los Cafeteros sacaron a Uruguay luego de un soporífero 0-0 que guardó todas las cargas sensibles para los penales, donde Ospina fue una muralla y contuvo dos disparos charrúas.

En el turno nocturno, Argentina pudo imponerse en una verdadera batalla contra Ecuador a quien terminó goleando 3-0 tras sufrir en partes del desarrollo. Con otra actuación icónica de Lionel Messi, el equipo continúa en el camino que obsesiona al astro.

Brasilia será la sede para el cruce entre dos conocidos que deberán definir a uno de los finalistas del certamen desempeñado en tierra brasileña.

Colombia eliminó a Uruguay en un partido muy cerrado

El primer juego de cuartos de final tuvo lugarnen el estadio Mané Garrincha, de Brasilia. En la capital del país anfitrión, la Celeste y los Cafeteros chocaron en busca de un boleto para las semifinales del torneo. Estos últimos fueron los que obtuvieron el pase a la próxima fase tras empatar 0-0 e imponerse 4-2 en los penales.

El cotejo, uno de los más atractivos que -en los papeles- podía ofrecer la competición, fue típico de Copa América: parejo, de mucho estudio, con miedo a perder y con más pretensiones de anular las virtudes ajenas que potenciar las pertenecientes.

En el primer tiempo, el desarrollo fue muy igualado. Los dirigidos por Oscar Washington Tabárez salieron con la intención de esperar en el campo propio e intentar algún contragolpe. Sin embargo, no tuvieron la capacidad para explotar los pocos espacios que dejaron los colombianos, que fueron los protagonistas.

Colombia, que extrañó el talento de Juan Guillermo Cuadrado, fue el dueño de la pelota, aunque el atasque que hicieron los charrúas lo neutralizó. Pese a tener la soberanía territorial, no pudieron progresar y terminó siendo una tenencia inofensiva.

En los primeros 45 minutos escasearon las oportunidades de gol. Apenas un atropello de Edinson Cavani que culminó en un remate desviado fue lo más cerca que estuvo Uruguay de marcar. La más clara la tuvieron los hombres de Reinaldo Rueda con un mano a mano de Duvan Zapata que tapó Fernando Muslera. Luis Muriel capturó el rebote, pero su definición fue ancha.

Ospina se convirtió en figura en la tanda de penales

El complemento tuvo otra dinámica desde el comienzo. Pese a que Colombia merodeó el gol con un centro que no pudo conectar Zapata, el dueño fue Uruguay. Los charrúas hicieron trabajar a David Ospina con un centro pasado de Nahitán Nández que tenía destino de red y un liviano disparo de Giorgian de Arrascaeta.

Con el correr de los minutos, el dominio regresó hacia Colombia. Lentamente fue encerrando a Uruguay en su propia área, pero sin jugadas de peligro neto. Solamente contó con un cabezazo a quemarropa de Zapata que encontró una gran respuesta de Muslera. La paridad no pudo romperse y debieron decidir al semifinalista en los penales tras el 0-0 en el tiempo reglamentario.

En los tiros desde los doce pasos Colombia fue más preciso. Tuvo 100% de efectividad en las definiciones y a Ospina como héroe de la tanda al desviar los remates de los defensores José María Giménez y Matías Viña. Con el pie caliente de sus ejecutantes y las manos firmes de su guardameta, los colombianos se metieron entre los cuatro mejores de la Copa América.

Argentina sorteó a Ecuador en un duro combate

La Albiceleste goleó 3-0 a La Tri en lo que fue un enfrentamiento áspero, lleno de fricciones y que se aseguró en los minutos finales del partido. Pese a lo que marca el resultado, debieron trabajar más de la cuenta para eliminar a los hombres de Gustavo Alfaro.

Los dirigidos de Lionel Scaloni tenían que asistir a la cita con la carga que implica ser el favorito. Aun así, la nueva generación de Argentina, encolumnados detrás de la figura de Lio Messi, dieron una muestra de carácter y revalidaron su condición de candidato al título.

En el inicio del encuentro salieron con una voracidad ofensiva que fue incontenible para Ecuador. Una oportunidad muy clara de Lautaro Martínez, que dejó en el camino a Hernán Galíndez. Este resolvió, pero Pervin Estupiñán la despejó en la línea. Fue un aviso. El atacante del Inter tuvo otro remate que se fue cerca. Luego, tras un córner, Germán Pezzella sacó una volea que salió pegada al poste derecho del portero.

A los 22, Messi aprovechó un error garrafal de Carlos Gruezo para irse mano a mano contra Galíndez, pero su definición se estrelló en el poste. Sin embargo, a medida que las situaciones se escurrían, Argentina retrocedía y lo invadía el nerviosismo.

Ecuador tuvo un cabezazo de Enner Valencia y una bomba de Gruezo que exigió a Emiliano Martínez. El gol argentino llegó en el momento más complejo para la Albiceleste: Messi habilitó a Nico González, Galíndez salió lejos y lo cortó, pero el balón volvió a Messi, que asistió a Rodrigo De Paul para que firmara el 1-0.

Argentina, en una montaña rusa de emociones: del padecimiento a la explosión del final

En el complemento, el desarrollo se tornó favorable para Ecuador que, a puro empuje, acorraló a la Albiceleste contra el arco de Martínez. En un segundo tiempo más peleado, que tuvo amontonamientos y discusiones en las que el árbitro intervino con frecuencia, los de Scaloni caminaron por la cornisa.

Pero fue el propio entrenador quien, con sus cambios, encausó el trámite otra vez para Argentina. Los ingresos de Guido Rodríguez y Ángel di María refrescaron el mediocampo y le devolvieron el protagonismo. Con Messi al frente, con la presión de Lautaro y De Paul para recuperar rápido y el atrevimiento de Di María, el partido se liquidó.

Primero fue Martínez quien, con asistencia de Messi por una recuperación en la salida ecuatoriana, anotó el 2-0 con una soberbia definición arriba a los 84 minutos. Luego, a los 92’, La Pulga le puso la frutilla con un tiro libre, excelente, que se metió en el ángulo izquierdo del arco de La Tri, que finalizó con diez hombres por la expulsión de Piero Hincapié.

La Albiceleste obtuvo el premio. En la primera mitad lo trabajó y lo mereció; en el segundo lo luchó y sufrió para asegurarlo en la recta final sobre un adversario complejo como fue Ecuador. La obsesión de Messi, que ahora está a un gol de Pelé como máximo anotador de selecciones sudamericanas, sigue latente.

 

France24