António Guterres fue reelegido como secretario general de la ONU

Mediante una votación, los 193 miembros de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas confirmaron a Guterres para un segundo periodo de cinco años como secretario general del organismo. Tras su reelección, el portugués pidió la cooperación internacional ante los principales desafíos globales, incluido el cambio climático y la recuperación de la pandemia del Covid-19.

Por unanimidad y como se esperaba tras la recomendación que hizo el Consejo de Seguridad de la ONU a principios de este mes de junio, António Guterres fue reelegido como secretario general de la organización. Su segunda etapa en el cargo comenzará a partir del 1 de enero de 2022.

Inmediatamente después de confirmarse su reelección, Guterres prestó juramento y pronunció un discurso en el que instó a los países miembros de Naciones Unidas a «hacer todo lo posible para superar las actuales divisiones geoestratégicas y las disfuncionales relaciones de poder».

«Me siento profundamente honrado y agradecido por la confianza depositada en mí para servir como Secretario General de las Naciones Unidas por un segundo mandato», publicó más tarde en su cuenta de Twitter.

El exprimer ministro de Portugal indicó que la lección más importante que aprendió en su primer mandato es la necesidad de reconstruir la solidaridad y, «si hay algo que necesito hacer mejor en mi segundo mandato, es asegurarme de hacer todo lo posible para reconstruir la confianza, confianza entre gobiernos, confianza entre personas e instituciones y confianza en las Naciones Unidas», explicó.

Guterres pidió cooperación internacional ante «una serie de fragilidades dramáticas», al referirse a la pandemia, el cambio climático, la anarquía en el ciberespacio y la división geopolítica. Enfatizó en que todo esto debe abordarse uniendo a las naciones del mundo y fortaleciendo el multilateralismo.

«Este es un momento para entender que cada país por sí solo no puede hacer nada (…) que los países deben unirse», afirmó, subrayando a la vez que «reconstruir la confianza es la forma de hacer posible lo imposible. Si permanecemos divididos, lo imposible seguirá siendo imposible y las fragilidades de este mundo se presentarán en un sufrimiento mayor para la gente, especialmente para los más vulnerables de los vulnerables».

Guterres juramentó su segundo mandato entre elogios y peticiones

El secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken, y la canciller alemana, Angela Merkel, elogiaron el liderazgo del portugués durante su primer periodo al frente de la ONU.

Blinken llamó a Guterres un líder «orientado a los resultados» y «capaz en un rol exigente» (…) las Naciones Unidas son un ancla indispensable del sistema multilateral en el que los países trabajan juntos para enfrentar desafíos sin precedentes como la pandemia, el cambio climático, los derechos humanos, el desarrollo, la migración y las crisis humanitarias», resaltó.

Por su parte, Merkel exaltó el compromiso del secretario general con las soluciones pacíficas a los conflictos, la protección del clima y las «soluciones innovadoras a los problemas globales» que, en su opinión, logró en su primer mandato.

Asimismo, destacó el respaldo de Guterres para establecer la instalación del mecanismo Covax para llevar vacunas a los países más pobres. «La pandemia del coronavirus en particular nos ha demostrado que la capacidad de las Naciones Unidas para reaccionar rápidamente a los desafíos actuales es esencial», aseguró la líder alemana.

Sin embargo, el diplomático portugués también ha llegado a ser criticado por acciones durante su primer periodo frente a la ONU.

Entre ellas, no reprochar a Rusia, China o Estados Unidos –cuyo apoyo necesitaba en la votación–, especialmente en cuestiones de derechos humanos, incluida la represión de Beijing contra los musulmanes uigures en Xinjiang y los ataques de Moscú a los opositores.

La política de «Estados Unidos primero» del expresidente Donald Trump tampoco llegó a señalarla, cuando a consideración de las ONG internacionales ello contradecía la insistencia de Guterres en que las naciones solo pueden resolver problemas trabajando juntas.

Con un segundo término de cinco años asegurado para Guterres, el director de Human Rights Watch ante la ONU, Louis Charbonneau, afirmó que el secretario general «debería empezar a llamar a todos los gobiernos que cometen abusos contra los derechos humanos, incluidos aquellos que son poderosos y están protegidos».

France24 con Reuters y AP 

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