Italia: Fiscalía interrogó al primer ministro por gestión de la pandemia

El premier italiano, Giuseppe Conte, declaró durante tres horas este 12 de junio ante la fiscal Maria Cristina Rota, sobre la respuesta del Gobierno al brote de Covid-19. El virus deja más 34.000 personas muertas en este país, uno de los más afectados del mundo por la pandemia.

«Volvería a hacer lo que hice porque actué basado en la ciencia y la conciencia», aseguró el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, en una entrevista con el diario local La República, publicada este viernes. El dirigente fue citado a declarar en calidad de “persona informada” y por el momento no tiene imputación de delitos en su contra.

Tras finalizar el interrogatorio de tres horas en el Palacio Chigi de Roma, el político informó a través de su portavoz que explicó “todos los pasos hasta en los mínimos detalles», ante los fiscales que llevan el caso.

Después de Conte, testificaron la ministra del Interior, Luciana Lamorgese, y el ministro de salud, Roberto Speranza, considerados dos de los máximos encargados de dirigir a Italia cuando el país entró en la mayor crisis sanitaria de su historia reciente.

Pero estos no son los primeros interrogatorios a funcionarios públicos en un intento de la Fiscalía por encontrar posibles responsabilidades. A finales de mayo fueron interrogados el gobernador de la región de Lombardía, Attilio Fontana, y su consejero de salud, Giulio Gallera.

¿Por qué no se aisló Bérgamo antes?

Una de las dudas que los investigadores intentan esclarecer son las razones por las que los Gobiernos, local y central, no impusieron un cierre preventivo temprano en varias ciudades de la provincia de Bérgamo, cuando ya había datos que certificaban la presencia del virus en calles y hospitales de sus municipios.

La fiscal de Bérgamo, Maria Cristina Rota, es vista fuera del Palacio Chigi, después de escuchar al primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, al ministro de Salud, Roberto Speranza, y a la ministra del Interior, Luciana Lamorgese, tras un interrogatorio sobre su gestión ante la pandemia. En Roma, Italia, el 12 de junio de 2020.

La fiscal de Bérgamo, Maria Cristina Rota, es vista fuera del Palacio Chigi, después de escuchar al primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, al ministro de Salud, Roberto Speranza, y a la ministra del Interior, Luciana Lamorgese, tras un interrogatorio sobre su gestión ante la pandemia. En Roma, Italia, el 12 de junio de 2020. © Reuters/Remo Casilli

Lombardía, cuya capital es Milán, es la región más afectada de Italia. Allí se registran más de 16.000 muertes, es decir casi la mitad de la cifra total de fallecimientos en todo el país, que asciende a 34.223 al 12 de junio.

En específico, la fiscal María Cristina Rota y su equipo están tratando de averiguar por qué no se aislaron las ciudades de Nembro y Alzano en la provincia de Bérgamo. Los expertos en salud indican que, si el área hubiera sido puesta en cuarentena antes, se habrían salvado muchas vidas.

En febrero, el Gobierno local cerró algunos municipios, pero dejó por fuera a Nembro y Alzano, tiempo en el que el virus circuló por toda la zona hasta que la situación pasó a ser crítica, según denunciaron familiares de las víctimas al ente investigador.

El aislamiento de estos dos lugares sólo ocurrió hasta el 8 de marzo, momento en que las autoridades decretaron el cierre de la región en su totalidad y de otros territorios aledaños. El anuncio llegó justo un día antes de que se declarara el confinamiento nacional y cuando la situación ya era crítica en esas localidades de Lombardía, donde comenzó la propagación del virus dentro del territorio italiano.

¿Hubo presiones económicas?

Las sospechas de familiares e investigadores gira en torno a que precisamente las zonas que no fueron cerradas en ese momento, Nembro y Alzano, son localidades de alta concentración industrial ubicadas en el corazón económico del país.

Otro de los señalamientos es que para el 28 de febrero se presentó una campaña de la Confederación General de la Industria Italiana, conocida como Confindustria, llamada “Bérgamo sigue funcionando”, y en la que incluso participó el alcalde de la ciudad Giorgio Gori.

“Todos hemos cometido errores. Los virólogos, los periodistas, los administradores, y yo también. Pero (antes que la pandemia explotara) no teníamos la información y nos decían de estar tranquilos”, dijo Gori al ser interrogado quienes perdieron a sus seres queridos.

Mientras gran parte de los ciudadanos retornan a la normalidad, o “nueva normalidad”, familiares de quienes murieron no piensan en disfrutar de la flexibilización para la vida social. En cambio se concentran en exigir que se esclarezca si hubo sectores del empresariado que presionaron para que no se cerraran las fábricas y la economía en general en una de las regiones más ricas del territorio nacional.

Una situación que habría llevado a la posterior saturación de los hospitales, por lo que muchos no pudieron recibir atención médica a tiempo, hasta que perdieron la vida.

France 24

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