El oeste de Maracaibo reclama silente su autonomía

Esta zona la describen como otro mundo, otra ciudad. Sus residentes la llaman “el patio trasero de Maracaibo”, que se conecta con la Bomba Caribe (norte), La Curva de Molina (centro) y Los Plataneros (sur), puntos periféricos donde, incluso, hacen vida el comercio formal e informal como si fuese el propio casco central.

A propósito de la primera acción del 2020 anunciada por el alcalde de Maracaibo, Willy Casanova, se iniciaron trabajos de remodelación en la Curva de Molina como parte del plan Venezuela Bella al oeste de la ciudad.

Idelfonso Vásquez, Venancio Pulgar, Antonio Borjas Romero, Carracciolo Parra Pérez, Raúl Leoni, Francisco Eugenio Bustamante y San Isidro son las siete parroquias que integran la zona oeste de Maracaibo.

Sin embargo, esta zona de Maracaibo no deja de ser la más olvidada. Sus carencias están siempre vigentes, pero a la hora de una disputa electoral se convierte en la más codiciada por factores políticos.

Los servicios públicos continúan sin consolidarse, un transporte deficiente y altos índices de inseguridad son parte de las penurias que a diario enfrentan sus habitantes.

“Hay tantos barrios, como pobreza. Por más que le inviertan no se le ven los cambios”, señala Yolanda Alaña (60), habitante del sector Carmelo Urdaneta.

Nunca es suficiente

En esta zona comenzaron a constituirse en comunidades organizadas a partir de principios de los años 60, mientras que el proceso de consolidación se inició en los años 1980.

“Todos los gobiernos asisten las necesidades de la población cuando estos sienten una presión en la sociedad organizada, pero siempre la parte más culminada del oeste es donde hay  asfalto o el trabajo está más hecho es la que recibe más atención, pero la asistencia no llega en donde ni siquiera hay carreteras”, opinó Ramón Martínez, habitante de La Lagunita.

Por su parte, el politólogo Jesús Castillo Molleda acredita  este “olvido” hacia Maracaibo oeste a “la pasividad de sus habitantes y el egoísmo de los gobernantes por contar con más poder y recursos, pues es una zona que ha coqueteado con la idea de ser un municipio autónomo”.

Pero habitantes de la zona consideran que ya es hora de que el sector se convierta en un municipio autónomo para contar con autoridades más cercanas que le respondan.

En 1995 hubo una propuesta ante la otrora Asamblea Legislativa. Sin embargo, en la última década es una de las zonas de la ciudad que ha recibido la mayor inversión en infraestructura con la construcción de viviendas.

Aunque continúa su lucha por crecer a la par con el resto de los puntos cardinales de la ciudad, ya que compite con el desarrollo de su área comercial.

¿El año del oeste marabino?

No es nueva la promesa del alcalde en cuanto a la atención prioritaria de este sector. Willy Casanova es oriundo de la zona, pero a su vez deja entrever que el ayuntamiento podría no tener capacidad para atender de manera integral las comunidades.

Así han pasado los años, pero en las profundidades del oeste maracaibero la atención no es la esperada. Para noviembre del 2018, Casanova anuncio en su cuenta de Twitter que para el 2019 las cosas cambiarían en esas comunidades.

“¡El año que viene es el año del oeste de Maracaibo! Yo vengo de aquí, de esta realidad, de esta vivencia, que la sufro y también disfruto, porque no hay nada más sabroso que convivir en el barrio, pero hay que cambiar las cosas”, tuiteó.

En su momento, el entonces diputado constituyente por el estado Zulia Willy Casanova encabezó la propuesta para la creación del municipio Maracaibo Oeste ante la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) con el propósito de consolidar una forma de gobierno cercana a la gente de esas comunidades.

“Tenemos que entender y reconocer que en Maracaibo oeste vive una masa poblacional enorme que hay que atender de manera diferenciada, queremos tener un gobierno cercano a la gente, que el pueblo tenga a quien acudir y que se les dé respuesta a sus necesidades”, comentó.

Agregó además para entonces, que en el oeste tiene sus zonas industriales, varios centros comerciales, del cual se genera 45% de los ingresos de Maracaibo, y con la creación de ese municipio esos recursos estarían más próximos para la atención de la siempre olvidada zona.

“Si nosotros logramos resolver ese problema vamos a tener los recursos necesarios para invertir en el oeste y lograr el desarrollo”, expuso el entonces diputado.

La Verdad