Los ejercicios de Kegel y sus beneficios

Los ejercicios de Kegel consisten en la contracción del músculo pubocoxígeo, que implican movimientos destinados a fortalecer los músculos pélvicos.

Son ideales para prevenir y solucionar problemas de incontinencia urinaria en mujeres que dieron a luz, tuvieron una cirugía, envejecimiento, entre otras causas. Al trabajar el suelo pélvico es posible un mayor control y fortalecimiento de los músculos debajo del útero, la vejiga y el intestino (grueso), además de mejorar la función sexual.

Los músculos de la pelvis trabajan de forma conjunta con el oblicuo interno y con el transverso del abdomen para estabilizar la postura. Estos no requieren de un movimiento visible del cuerpo, pues se encargan de la musculatura interna, y pueden realizarse en cualquier lugar y momento.
Lo ideal es realizarlos sentados, pero si eres principiante puedes empezar a hacerlos tumbado para evitar la fuerza de la gravedad.

Coloca la cadera en una posición neutra y realiza el movimiento en cuatro pasos: contracción y elevación de la musculatura pélvica, mantén la posición, regresa a la posición inicial y, finalmente relaja. Debes respirar con normalidad y tener la columna alineada. Los muslos, glúteos y abdomen deben estar relajados.

Beneficios
• Son recomendados para hombres y mujeres de cualquier edad.
• Tonifica la musculatura vaginal, lo que mejora la fricción durante la penetración, aumentando la sensibilidad.
• Ayuda a cuidar y prevenir lesiones luego de un trabajo pesado.
• Recupera el tono muscular, debido a que ayuda a potenciar y fortalecer la zona, ideal luego del parto.
• Aporta control de la incontinencia, urinaria y fecal.
• Para las mujeres embarazadas, tonifica los músculos vaginales mejorando las posibilidades de un parto exitoso.
• En los hombres pueden ayudar contra la eyaculación precoz.

DC|EM