#12J Desvíos hacia El Aeropuerto causan retraso y daños a vehículos marabinos

Las vías alternas que  conducen al aeropuerto internacional La Chinita de Maracaibo y que sirven de puerta de entrada a la capital del Zuilia requieren mejor adecuación para su uso temporal mientras se culmina el distribuidor Maisanta.

Los pasajeros del aeropuerto, que deben pasar por esas vías en la madrugada o por las noches, se quejan de la oscuridad del camino, y los conductores frecuentes exigen que se asfalten los tramos de tierra y se eliminen las dos zanjas que se abrieron como “reductores”, pues daña el tren delantero y los cauchos ahora totalmente escasos.

Pronto llegarán las lluvias y temen que esas vías alternas se vuelvan intransitables, aunque  las autoridades hicieron un esfuerzo en señalizarlas para evitar que los usuarios se pierdan. Otro problema no menos importante lo viven quienes deben caminar por la zona. «Tengo que salir todos los días dos horas antes de mi casa para llegar a tiempo a mi trabajo, el tráfico es terrible», esto respondió Laura Pino, docente que habita en Altos del Sol Amado, vía al aeropuerto, al ser consultada por PANORAMA sobre cómo han afectado su cotidianidad los trabajos del Distribuidor Maisanta.

El 14 de abril arrancó la construcción de la obra, ejecutada por el Invez, en la intersección del Corredor Hugo Chávez Frías (antigua Circunvalación 3) y la avenida Don Manuel Belloso (vía al aeropuerto), en Maracaibo, con una inversión de 780.000.000 millones de bolívares.

A pesar de las dos vías alternas habilitadas para mejorar el flujo vehicular en la zona, los usuarios insisten en la calamidad que supone atravesar la zona a cualquier hora del día, y especialmente en horas pico, donde pueden tardar hasta 30 minutos en llegar al terminal aéreo.

Exigen que se eliminen estas zanjas que hacen las veces de “reductores”. El golpe en el tren delantero y en los cauchos es muy fuerte a cualquier velocidad.
Solicitan asfaltar o demarcar de otra forma las zonas en las que se debe bajar la velocidad.

«Los desvíos nos han afectado en muchas cosas, ahora tenemos que estar saliendo, pidiendo cola, expuestos a un atraco, a que nos maten por andar pidiendo cola porque no hay tráfico para acá en Altos del Sol Amado (…) Para llevar a mis nietos al colegio es otro problema, tenemos que andar llamando taxi, y con esta economía, son demasiado caros, nos tienen arruinados», denunció Yadira Fernández, de 62 años de edad y ama de casa.

José Solarte, taxista, clama por mayor organización en los desvíos para evitar que se formen las colas, «por las tardes se ponen peor, y hay unos baches de este lado de la vía al aeropuerto y del lado del Metro de Maracaibo, ya uno no halla cómo hacer. Ahora hay demasiada gente varada esperando por transporte, desde que comenzaron la construcción ha sido un problema para todo, yo soy taxista y ya no hallamos cómo trabajar, se pierde mucho tiempo. Cuando lleguen las lluvias se va a poner peor».

 Carlos Lamus, presidente del Instituto de Vialidad del Zulia, respondió que «tenemos que interrumpir la vía que da hacia el aeropuerto porque ahí vamos a construir el puente (…) Cuando estamos haciendo los trabajos, necesitamos hacer desvíos (…) Eso nos genera un fuerte congestionamiento vehicular que tratamos de controlar no solamente con la habilitación de los desvíos sino además con los milicianos que hemos colocado en esas zonas para controlar el flujo y también efectivos de la Policía Nacional Bolivariana. Eso es para las horas picos y todo el día».

“Decidimos abrir una zanja para alertar a los conductores (…)  para alertar y despertar al usuario. Ya tenemos tres semanas que no se presenta ningún tipo de incidente, porque la gente se ha acostumbrado a esa obra que está allí y lo que haremos esta semana, seguramente, vamos a suavizarla, rellenar con arena para que el impacto sea menor”.

Sin embargo, la caída de los vehículos en estos reductores sigue ocasionando malestar entre pasajeros y usuarios de la vía insisten en reemplazar los baches por policías acostados, ojos de gato u otra obra que no ocasione daños mecánicos.

Lamus pidió comprensión a todos los usuarios, «esperamos saldar con creces todas las molestias que estamos causando en la colectividad cuando entreguemos la obra».

Sobre el flujo de transporte público vía al aeropuerto, indicó que se mantienen en contacto «con las líneas de transporte y lo que hacemos es que privilegiamos el paso del transporte público, autobuses, microbuses o carros por puesto, de forma tal que cuando esté administrando los pasos, siempre tenga preferencia el transporte. Sobre todo en las horas pico es que nacen las colas».

«Aspiramos para la primera semana de diciembre, debemos estar habilitando el paso por la vía hacia y desde el aeropuerto, estaría el puente concluido para la primera semana, y todavía estaríamos trabajando en la parte inferior, en la circunvalación 3, pero el mayor trauma que nos causa es el de arriba, el paso rápido», señaló.

El secretario de Infraestructura, Jairo Ramírez, afirmó que se están reforzando los puntos de atención en las vías alternas, «los puntos de seguridad para los transeúntes puedan estar tranquilos, con efectivos de seguridad, milicianos, todo un equipo (…) se están haciendo estaciones para la parada de autobuses, en Cuatricentenario también avanzan los trabajos del corredor Antonio José de Sucre», y así reducir las molestias entre los usuarios.

«Entendemos que las obras están generando molestias entre los marabinos pero son trabajos que luego se traducirán en beneficios.  Se están acelerando las labores más allá de la planificación, a finales de este año se estima culminar la primera parte de la obra, la superior, el corredor Don Manuel Belloso y seguir abajo trabajando en los seis canales», manifestó.

DC – Panorama

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